Obras en plena hora punta colapsan la A-7: hasta 90 minutos atrapados camino de Málaga

Numerosos conductores se han visto sorprendidos al encontrarse una obra que puede programarse en franjas de menor tráfico en un día laborable, lo que ha convertido el tramo en un embudo crítico.

La DGT ha señalado que la empresa de conservación disponía de permiso hasta las 07.00, circunstancia que ha contribuido al colapso en el arranque de la jornada. El organismo dependiente del Ministerio del Interior admite que ha sido un error mantener una ventana de trabajo que invade la hora punta y ha trasladado ya a las contratas la instrucción de finalizar estas actuaciones antes de las 06.00 para evitar que se repita.

La titularidad de la A-7, así como su conservación y explotación, corresponde al Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible (Mitma), que licita y dirige los contratos de mantenimiento en la Red del Estado. Interior, a través de la DGT, autoriza y condiciona las ocupaciones por obras, mientras que Transportes es responsable de cómo y dónde se interviene en la vía estatal y de programar inversiones de capacidad. Este reparto competencial es clave en un corredor donde cualquier incidencia, obras, picos de demanda o accidentes, deriva en colas kilométricas.

Desde el Partido Popular se considera que lo ocurrido no es un simple error, sino una negligencia de planificación que refleja la falta de previsión del Gobierno. El coordinador general del PP de Málaga, Cristóbal Ortega, ha señalado directamente al PSOE por la gestión del tráfico en el Este metropolitano.

Ortega ha denunciado que el Ejecutivo de Sánchez y Puente no quiere formar parte de la solución al colapso en las carreteras de la provincia; es parte del problema y el «principal escollo« para impulsar soluciones a corto plazo.

El dirigente popular insiste en que Transportes mantiene su inacción inversora en un tramo crítico donde los atascos se repiten por obras, accidentes o por el elevado volumen de tráfico.

El PP subraya que lo de hoy no es un hecho aislado y vuelve a pedir medidas estructurales para el tramo oriental. Como palanca inmediata, reivindica el plan de bajo coste presentado por la Diputación de Málaga junto a los ayuntamientos de Málaga y Rincón de la Victoria, basado en un estudio técnico de la Fundación Madeca.

El documento propone una inversión de 14,1 millones de euros para ejecutar siete actuaciones en enlaces, con el objetivo de ordenar entradas y salidas, alargar ramales y segregar movimientos conflictivos. Además, plantea la implantación de un tercer carril en tramos concretos, entre El Palo y La Cala del Moral y entre Añoreta y Vélez-Málaga, como solución eficaz para aliviar la congestión mientras se define una actuación de mayor alcance.

El equipo popular reprocha al Gobierno que haya desoído estas propuestas y recuerda que, al tratarse de una carretera estatal, la planificación y los estudios forman parte de las competencias del Mitma, por lo que exige su incorporación a la agenda de actuaciones en la A-7.

El incidente deja en evidencia los problemas estructurales de la A-7, una vía al límite de su capacidad y sin inversiones de calado. Aunque la DGT ha reconocido el error y corregido los horarios de actuación, el PP insiste en que no se trata de un fallo puntual, sino de una negligencia en la planificación y del abandono del Gobierno hacia la movilidad en la provincia.

Hasta que no se acometan medidas efectivas, como el tercer carril y la reordenación de enlaces, cualquier incidencia volverá a traducirse en kilómetros de retenciones y horas de frustración para miles de malagueños.