El ministro Óscar Puente levanta en Alicante el peaje que niega a la autopista de Málaga

Así, los ayuntamientos de la Costa del Sol, la Diputación Provincial de Málaga y el Partido Popular llevan tiempo clamando por la liberalización de la AP-7 como medida alternativa hasta la ejecución del eje ferroviario, pero el ministro de Transportes, Óscar Puente, no ha tenido en cuenta estas demandas, por lo que la liberación de Alicante es recibida en Málaga como un claro agravio comparativo por parte del Gobierno de España. En el Ministerio de Transportes tampoco ha calado la histórica petición del tren litoral.

La presidenta del PP de Málaga, Patricia Navarro, ha exigido al Gobierno de España que dé a la provincia de Málaga «el mismo trato» que a Alicante y libere «de inmediato» el peaje de la autopista de la Costa del Sol. Navarro espera que en la reunión convocada para este miércoles entre el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, la Junta de Andalucía, la Diputación de Málaga y 18 ayuntamientos de la Costa del Sol y Cádiz haya «un gesto de buena voluntad» por parte del Ejecutivo con la provincia malagueña. «Es una gran oportunidad para que el Gobierno demuestre que no discrimina a territorios. Málaga lleva mucho tiempo con problemas de movilidad que requieren de medidas urgentes como la adoptada en Alicante», ha indicado en una nota.

En este sentido, ha incidido en que la reunión de este miércoles es «la ocasión idónea» para que el Gobierno de España «demuestre que no hace agravios entre territorios, como nos tiene acostumbrados hasta ahora».

La Costa del Sol, subraya la presidenta del PP malagueño, «necesita que se libere el peaje para dar más fluidez al tráfico porque lo demandan los malagueños. Tenemos que cortar de raíz el colapso en la autovía A-7 y avanzar en seguridad vial y liberar el peaje de la autopista debe ser algo inmediato», apuntó.

Recuerda que esta medida debe adoptarse como paso previo al avance para la construcción del tren litoral, en una primera fase desde Málaga a Marbella y después hasta Algeciras para atender la demanda poblacional creciente y para vertebrar el litoral. «Nuestra provincia se merece el mismo trato que otros territorios y confiamos en que de una vez por todas el Gobierno deje de ningunear a Málaga y nos tenga en cuenta en proyectos e inversiones», sentenció.

La autovía de la Costa de Sol es la alternativa a esta autopista, una de las más caras del país. En dicha autovía se han cronificado los atascos y los accidentes. Y es precisamente la siniestralidad uno los motivos por los que Puente justifica la liberalización del tramo alicantino, condición que también se da en el caso malagueño. El otro argumento es la densidad del tráfico, algo que también se da en el tramo costasoleño. El trazado y los precios son las principales diferencias. La autopista malagueña es más extensa (82,7 km frente a los 33 km de Alicante) y tiene tarifas bastante más altas, oscilando entre 5,25 y 8,60 euros, mientras que en Alicante es de 1,40 euros.

Por su parte, el subdelegado del Gobierno en Málaga, Javier Salas, aseguró ayer que ambos casos no son equiparables. Según explicó, Ausol es titular de las concesiones administrativas para la construcción, conservación y explotación de las autopistas AP-7 Málaga-Estepona (en explotación desde el 25 de junio de 1999) y la AP-7 Estepona-Guadiaro (en servicio desde el 12 de agosto de 2002), más conocidas en su conjunto por la autopista del Sol. El tramo Málaga-Estepona está concedido hasta 2046, y el tramo Estepona-Guadiaro hasta 2054.

Por el contrario, Salas indicó que que la AP-7 Circunvalación de Alicante está gestionada por la empresa pública SEITT (Sociedad Estatal de Transporte Terrestre) desde 2018, cuando tuvo que revertir al Estado por problemas financieros, y que tiene un régimen de explotación público articulado a través de un convenio que prevé que se realicen bonificaciones.

«El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible considera como uno de sus objetivos incentivar el uso de las autopistas gestionadas por SEITT, especialmente cuando pueda mejorar la congestión y las condiciones de seguridad vial de las carreteras alternativas libres de peaje del mismo corredor. Por lo tanto, el caso de la autopista AP-7 en la Costa del Sol es completamente diferente al de la AP-7 Circunvalación de Alicante, dado que se trata de una autopista de peaje con un régimen de gestión privado a través de contratos de concesión entre la sociedad concesionaria y la Administración General del Estado», afirmó en un comunicado de prensa.

Salas agregó que las autopistas de peaje en régimen de concesión están reguladas por una normativa específica, «que forma parte de los contratos de concesión suscritos por las respectivas sociedades concesionarias y la Administración concedente. Dicha normativa establece unos derechos y obligaciones tanto para la Administración como para el concesionario. Entre los derechos de este último se incluye la percepción del peaje con arreglo a las tarifas aprobadas».