El Gobierno esquiva otra oportunidad de solucionar la movilidad del Mediterráneo andaluz

El vicepresidente primero de la Diputación de Málaga, Cristóbal Ortega, es el primero que ha lamentado la «nula voluntad» del Gobierno de adoptar medidas a corto y medio plazo para mejorar el colapso del tráfico en la provincia de Málaga. Pone como ejemplo que se desestime la propuesta de los ayuntamientos de Málaga y Rincón de la Victoria, así como de la propia Diputación para reformar siete enlaces de la autovía A-7, la implantación de un tercer carril en la zona oriental o la bonificación del peaje en la autopista de la Costa del Sol.

«Los malagueños y los gaditanos no merecen el menosprecio que nos ha transmitido el Ministerio de Transportes, sin aportar ninguna solución a los atascos y a la situación de colapso que sufre la red estatal de carreteras», ha afirmado Ortega, que asegura que se han «despreciado» las propuestas de los ayuntamientos «mintiendo sobre el peaje de la AP-7».

El vicepresidente de la Diputación ha instado al Ministerio a «compartir públicamente los estudios que supuestamente dicen que no habría ninguna transferencia de tráfico desde la A7 a la autopista entre Málaga y Guadiaro si se bonificara el peaje». «Eso es absolutamente falso y materialmente imposible», ha añadido Ortega.

El portavoz de la Diputación explica que si el uso diario de la autopista no costara alrededor de 20 euros y «si el Gobierno no la exprimiera como un bien de lujo«, miles de trabajadores malagueños y gaditanos la utilizarían para desplazarse. «Así se reduciría el colapso de la A7», ha concluido Ortega, que siente que se ha perdido el tiempo. «Esto ha sido una tomadura de pelo más del Gobierno y nos vamos con las manos vacías y una gran frustración», ha añadido.

La reacción vehemente es a una reunión en la que se esperaban propuestas de solución, pero ha servido para esquivar el compromiso de invertir en movilidad y desatascar el Mediterráneo andaluz, empezando por la Costa del Sol.

En la anterior reunión se anunció un estudio sobre el tren litoral desde Algeciras a Nerja, así como bonificaciones para la AP-7. Sobre el tren ha dicho que se están estudiando los posibles recorridos en una obra que será por tramos. Sin embargo, ha esgrimido la vieja cantinela de que no hay suelo disponible. Las expropiaciones es una de las excusas históricas contra esta obra.

Al mismo tiempo, ha señalado que se va a necesitar que todos los tramos cumplan con la rentabilidad que marca la Ley de Transporte Ferroviario. Eso en una provincia que tiene la línea de Cercanías entre Fuengirola y Málaga con la mayor rentabilidad de toda España. Avisa de que podrían quedarse en el limbo algunos tramos, como el Estepona-Algeciras o el Málaga-Nerja. Planteamientos que limitan el tren a un Málaga-Marbella-Estepona, como el proyecto que ya presentó el PP en 2018.

En cuanto a carreteras, Hernández ha expuesto una inversión de 250 millones de euros en proyectos ya conocidos, pero nada nuevo que solucione los problemas existentes. Ni siquiera los 14 millones que la Fundación Maeca ha estimado que cuesta arreglar los atascos de Málaga Este. Además, las bonificaciones de ocho céntimos por coche en la AP-7 fueron un sueño que nadie ha visto hecho realidad. Ni ese millón de euros se ha hecho realidad en estos meses.

Sólo ha habido una propuesta para el Cercanía, ya conocida, pero reiterada. El Ministerio de Transportes trabaja en reducir la frecuencia de los 20 minutos actuales a 15 minutos en el paso de los trenes, para aumentar un 60% la capacidad. Para eso trabajan en aumentar los andenes para que puedan soportar trenes más grandes.

Por tanto, tras la segunda reunión no ha avances con el tren que debe unir Algeciras con Nerja, ni mucho menos llevarlo hasta Motril y menos conectar todo eso con el Aeropuerto, que se está ampliando para seguir aumentando la llegada de nuevos vecinos a la Costa del Sol. No hay tren, pero tampoco carreteras.

El colapso de tráfico de la Costa del Sol seguirá como estaba. Los 30 kilómetros de Fuengirola a Marbella será el tapón que siga lastrando el desarrollo del Mediterráneo con conexión en todo el arco de las cuatro provincias desde Algeciras a Almería. Ni siquiera los ocho céntimos de bonificación en último peaje de Andalucía y el más caro de España es una realidad. Solo se propone meter mas usuario cada día la línea de Fuengirola-Málaga para seguir haciendo caja como la línea más rentable del país.