La Fiscalía sostiene que Dana Leonte fue asesinada y desmembrada por su pareja

El escrito concluye que Dana Leonte fue «desmembrada» y luego los repartió por el monte. Fueron los animales los han que ha ido sacando parte del cadáver. De hecho, el fémur con el que se consiguió la identificación y se pudo certificar su muerte, lo halló un perro de caza.

Según la reconstrucción de los hechos, el 12 de junio a las 8.36 horas, Dana Leonte tuvo una conversación con su pareja. Ella se quejaba de que su pareja el hubiera cogido el móvil. Esos mensajes de WhatsApp entre ambos fueron eliminados. Según la Fiscalía se trataron de borrar líneas de investigación.

Esa tarde el acusado, la fiscal concluye que el acusado «con absoluto deprecio a su libertad e integridad como mujer» la golpeó con un palo de madera en la cabeza y la mató. Asegura el Ministerio Público que hizo prevalecer su dominio sobre ella, como forma de supeditación a su interés propio, sin respetar su libertad para retomar su vida.

El golpe la habría dejado «inconsciente o malherida». Entonces añade que la mujer fue trasladada por el investigado o para ocultarla o para terminar de matarla. El escrito explica que la subió al todoterreno y luego «procuró esparcir y enterrar restos parciales del cuerpo de Dana Leonte» en el campo.

La Fiscalía detalla cada uno de esos hallazgos. El 21 de septiembre de 2019, un perro descubrió un hueso que, como se comprobó posteriormente, correspondía al fémur derecho de Dana. Ahí se detuvo a su pareja. El 8 de octubre, se localizaron una tibia, costilla, vertebras, cervicales y un peroné. El 14 del mismo mes, en otro punto del término municipal, se encontró una pelvis y parte de la zona lumbar.

Posteriormente, el día 21 de octubre, apareció el fémur izquierdo, que aún conservaba restos blandos y que presentaba una fractura ante mortem. El 30 de noviembre se localizó otra parte del mismo hueso.

La fiscal mantiene que el presunto asesino, que ya no está en prisión, «limpió el domicilio con lejía y aguarrás». En la vivienda, los agentes encontraron productos de limpieza y el palo de madera con un pelo de la víctima con su perfil genético.

Además, el registro proporcionó muestras de sangre en una toalla del cuarto de baño. También se hallaron muestras de perfiles del acusado y víctima mezclados en uno de los escalones de la vivienda, en la puerta del conductor del todoterreno, en el suelo de la cocina, en la pared donde se localizó el palo y un edredón con manchas de color rojizo.

El novio de Dana Leonte intentó ocultar supuestamente el asesinato con una coartada y varias versiones de los hechos. Según el escrito acusatorio, usó el móvil de la víctima y suplantó a la fallecida al realizar profusas conversaciones entre su teléfono y el de ella, así como con la persona que ejercía la función de cuidadora de la hija de ambos.

La Fiscalía también sostiene que el acusado conocía el terreno y con sus actos «propició evitar el hallazgo de los restos de la víctima», dada la constancia de «maleza, pedreras, vaguadas, arroyos y ríos». «De esta forma predeterminada ha aumentado el daño moral a las víctimas directas de los hechos, así como a la menor», apunta la Fiscalía.

Desde el 28 de septiembre de 2019, el acusado tiene suspendida la patria potestad de la niña y tiene prohibido acercarse a menos de 500 metros de su hija, de su domicilio o del lugar donde se encuentre como víctima directa de los hechos. También se ha acordado el acogimiento de la pequeña por parte de su tío, Florin Leonte.