Del espeto a Chiquito de la Calzada: los guiños de Google a Málaga en su nuevo centro de ciberseguridad

Ubicado estratégicamente en la antigua sede del Gobierno Militar, este espacio de 2.500 metros cuadrados nace mirando al futuro y con el propósito de liderar los avances y el desarrollo de herramientas en materia de ciberseguridad bajo el sello de un gigante como Google.

Curiosamente, las mentes encargadas de ejecutar todo esto estarán rodeados de un entorno que mira hacia atrás. Hacia el origen 'malaguita' de la empresa que ha hecho posible el desembarco de la multinacional en el corazón de una ciudad a la que el centro rinde tributo en cada esquina y en cada detalle.

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En la rehabilitación meticulosa del edificio, antigua sede del Gobierno Militar, se ha respetando su fachada protegida, pero los trabajos han revitalizado un inmueble abandonado durante décadas pese a estar en una de las zonas más cotizadas de la capital malagueña. Frente al Puerto de Málaga y con unas vistas privilegiadas al Muelle Uno, la Catedral o el Castillo de Gibralfaro que nadie ha disfrutado desde que el edificio quedara desmantelado en torno al año 2000.

Uno objetivo conseguido por Google ha sido el de dotar del estilo desenfadado y actual propio de sus espacios a las estancias de una edificación castrense de los años 50 que destaca por su austeridad y en la que prevalecía su funcionalidad administrativa y militar.

Un gran 'G' -de Google- da la bienvenida en la verja de acceso al recinto, donde los guiños a Málaga no se detienen en la arquitectura. Las dependencias del centro llevan nombres que resuenan en la idiosincrasia local, como de la sala Moraga -las típicas fiestas nocturnas en la playa- o Merendero -donde se da de comer a los más de 60 trabajadores que ya trabajan en el centro-. Aquí, unas cristales serigrafiados con las letras 'G' y 'M' que se hallaron durante las obras presiden la sala recordando el anterior uso del inmueble.

En el segundo piso está la sala Espeto, un espacio de esparcimiento hasta donde VirusTotal ha llevado el futbolín que les ha acompañado en todas sus sedes previas hasta aterrizar en la actual y que se asienta sobre unas baldosas cuyo diseño está inspirado en las pinturas murales que decoran la fachada de la iglesia de San Juan.

Google ha diseñado un entorno donde la interacción entre empleados es crucial. El área del comedor, con una mesa única, pretende promover la unión y el intercambio, al igual que las salas de reuniones, cuyo nombre es un recuerdo a ataques cibernéticos como WannaCry, Stuxnet o Mirai, una botnet que sigue activa.

Los espacios abiertos o separados por cristales también fomentan la conexión entre los trabajadores del centro, 70 de Google, buena parte de ellos malagueños, aunque el objetivo es llegar hasta el centenar. Entre los diferentes equipos que trabajan en GSEC Málaga se encuentran los de VirusTotal, Mandiant, Chronicle o Threat Analysis Group (TAG). Estos expertos también seguirán trabajando con otros de toda Europa y del mundo compartiendo experiencia, prácticas y herramientas para combatir las amenazas.

Lo harán bajo la atenta mirada del eterno Chiquito de la Calzada, que observa en un rincón desde el 'doodle' que la compañía creó cuando habría cumplido 90 años. Este recuerdo al humorista preside una sala de demostraciones en la que se custodia el ordenador más infestado del mundo, un proyecto creado para exponer los distintos tipos de 'malware' que existen, con 30 clases diferentes ejecutándose al mismo tiempo y más de seis millones latentes almacenados en disco.

Una zona a la que está previsto que empiecen a acudir también visitas escolares antes de que finalice el año. El primero en hacerlo será el Zona Sur de Vélez-Málaga, donde, precisamente, estudió siendo un niño Berardo Quintero.