Julián Muñoz, desesperado: «No dejen que muera en la cárcel»

Muñoz tiene miedo de morir entre rejas y aún confía en que los jueces le permitan el régimen de semilibertad por razones humanitarias, como contempla el reglamento penitenciario. En el escrito al que ha tenido acceso ABC asegura que «ante el riesgo de sufrir algún evento fatal para mi vida en cualquier momento, es decir, mi muerte en la cárcel», solicita volver a ser evaluado este mes de octubre , para lograr el tercer grado que la propia junta ya le concedió en agosto, una decisión que fue revocada por los jueces de la Audiencia de Málaga a petición de la Fiscalía. En el escrito el interno alude su situación de estrés carcelario y a las enfermedades «graves, incurables e irreversibles» que padece, como ratificaron los informes forenses remitidos a la prisión en febrero pasado.

Los intentos por que el ex alcalde de Marbella quede en libertad se han intensificado en las últimas semanas, sobre todo a raíz de permanecer diez días en el Hospital Clínico de Málaga y ser sometido el 30 de septiembre a un cateterismo .  A comienzos de ese mes se produjo la primera aparición pública de Muñoz tras meses entre rejas, para responder ante el juez del caso Fergocom,  uno de los 80 juicios que tiene pendiente por su polémica gestión municipal en Marbella. Ante la sala se vio a un Julián Muñoz muy alejado de la imagen altiva del ex alcalde que paseaba su amor con Isabel Pantoja, el de un hombre enfermo, más delgado y con dificultades para oir o moverse . «No sé si podré aguantar el juicio», le dijo al juez, que tuvo en cuenta su situación y le eximió de acudir a todas las sesiones del juicio.

La Junta de tratamiento de la cárcel de Alhaurín de la Torre tiene previsto reunirse la próxima semana y aunque a Muñoz no le corresponde acudir de nuevo por haber pasado por ella hace solo dos meses, su abogado, Antonio José Cabrera, considera muy probable que sea llamado a una nueva evaluación. El letrado ha pedido la anulación de la decisión de la Audiencia que le denegó el tercer grado y amenaza con recurrir al Constitucional por entender que se ha vulnerado el derecho a la vida y a la integridad física y moral de su defendido. Argumenta además que todos los informes médicos emitidos son unánimes y señalan que Muñoz no sobrevivirá más de diez años en su actual situación penitenciaria, con una «alta probabilidad» de morir antes de un año.

Julián Muñoz ha salido 31 veces de la prisión para someterse a revisiones médicas desde enero del año pasado. En diciembre del 2014, su cuadro médico de diabetes, dolencias cardiacas y pulmonares se complicó con un ictus y posteriores lesiones arteriales. En todo este tiempo ha perdido 30 kilos y su salud se ha ido deteriorando, hasta el punto de que según Cabrera, el médico forense del juez admite que en menos de un año, el ex alcalde ha pasado de ser una persona «capaz de mantener una actividad normal y tener signos menores de enfermedad» a convertirse en un «discapacitado, que requiere cuidados especiales y asistencia hospitalaria» .