Despoblación
La Junta instalará cajeros en 85 pueblos de Andalucía para luchar contra la exclusión financiera y la despoblación
El plan, promovido y financiado junto a las ocho diputaciones provinciales, beneficiará a 110.000 ciudadanos de municipios que no poseen oficinas bancarias
Pablo Marinetto
Málaga
Las dificultades para acceder a servicios básicos está detrás del éxodo rural que afecta al conjunto de España. Una dinámica que deja consigo pueblos fantasma repartidos por todo el territorio y que en Andalucía se han propuesto poner coto con una nuevo plan ... para combatir la falta de oficinas bancarias que obliga a centenares de andaluces, muchos de ellos personas de avanzada edad, a coger el coche para sacar dinero en efectivo o actualizar sus cartillas.
La Junta acaba de presentar la iniciativa 'Cajeros Automáticos para los pueblos', con la que se va a promover y financiar junto a las diputaciones provinciales andaluzas la instalación de cajeros automáticos en municipios de toda la región que carecen de ellos.
La consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos, Carolina España, lo ha presentado este lunes junto a Francisco Salado, presidente de la Diputación de Málaga. Solo en esta provincia se prevé que el proyecto pueda beneficiar a casi 45.000 ciudadanos de 27 municipios, pero en el conjunto de la comunidad, supondrá facilitar el acceso a un cajero a más de 110.000 personas de 85 pueblos repartidos por todas las provincias.
Salado y España han firmado la primera declaración de intenciones, antesala del protocolo para combatir la exclusión financiera y bancaria que se rubricará con las ocho diputaciones andaluzas y las entidades bancarias. Con este protocolo, los entes provinciales y la Junta de Andalucía trabajarán para que los pueblos andaluces que lo demanden cuenten con cajeros automáticos.
«El progresivo cierre de oficinas de entidades financieras en muchas localidades andaluzas que se ha producido en los últimos años priva a parte de la población, sobre todo a las personas de mayor edad, de la posibilidad del acceso a los servicios bancarios más esenciales, tanto a través de las oficinas bancarias como de un simple cajero automático», ha denunciado España.
Según la consejera, el plan es «una ayuda fundamental», dado que para algunos andaluces, el hecho de tener que desplazarse hasta municipios vecinos para sacar dinero supone «una auténtica barrera» por no contar con medio de transporte propio o porque su avanzada edad se lo impide. «Vamos a seguir ayudando a que en los pueblos se viva cada vez mejor, y un cajero es un paso más para conseguirlo», ha destacado.
La iniciativa cuenta con dos medidas que actuarán en paralelo. Por un lado, el impulso de la próxima firma del mencionado protocolo entre la Diputación malagueña, la Consejería, las siete diputaciones restantes y las entidades financieras que tengan interés, con la finalidad de asegurar una provisión adecuada de servicios financieros presenciales en los municipios que así lo demanden.
Subvenciones
Al mismo tiempo, se va a crear una línea de subvenciones -cuya orden de aprobación de bases se encuentra ya en el inicio de su tramitación-, destinada a aquellos municipios y entidades locales autónomas que no posean oficinas bancarias ni cajeros automáticos.
En este sentido, y a partir de la convocatoria para el año 2024, se van a subvencionar los gastos de instalación, puesta en funcionamiento y mantenimiento de estos cajeros. La Junta de Andalucía, por su parte, aportará el 50% de los 300.000 euros que están previstos como cuantía anual para el conjunto de las ocho provincias, mientras que el otro 50% será asumido por las diputaciones.
«Son los ayuntamientos los que tienen que solicitar incorporarse a este plan, que estoy seguro será de su interés», ha precisado el presidente provincial, Francisco Salado, para el que la medida «contribuye a la lucha contra la despoblación en el ámbito rural».
Ha incidido en que «se trata de que los ciudadanos de las localidades con menor número de habitantes dispongan de los mismos servicios que las grandes ciudades», para favorecer así su desarrollo y «hacer que sea mejor el día a día de quienes habitan en los pueblos más pequeños, fomentando además que más personas se vayan a vivir en ellos».
Precisamente la provincia de Málaga, junto con la de Almería, ya cuentan desde hace tiempo con iniciativas para frenar esta exclusión financiera. En la primera, la Diputación llegó a un acuerdo con Unicaja Banco para impulsar la instalación de cajeros en algunos pueblos pequeños de la Serranía de Ronda y de la Axarquía y también ha concedido ayudas por valor de más de 116.000 euros para adecuar espacios en los que instalar cajeros a ayuntamientos como los de Algatocín, Arenas, Benalauría, Canillas de Albaida, Cútar, Jimera de Líbar, Júzcar o Serrato.
En el caso de la provincia almeriense, un total de 33 pueblos cuentan desde 2020 con cajeros automáticos multiservicios que forman parte de un programa impulsado también por la Diputación en las comarcas de Filabres-Alhamilla, Nacimiento, Almanzora, Alpujarra y Poniente Almeriense.
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