Caos en Linares: 13 detenidos y 19 policías heridos por los disturbios tras la paliza de dos agentes a un vecino

El comisario jefe provincial y el jefe de operaciones del cuerpo de seguridad del Estado se han desplazado hasta la ciudad para dirigir la operacón contra los radicales, que se han enfrentado directamente a las fuerzas del orden, a la que han arrojado piedras y otros objetos contundentes .

En respuesta, los antidisturbios han detenido en principio a tres personas, después a una cuarta y posteriormente a otras siete tras radicalizarse la protesta, lo que ha obligado a acordonar la Comisaría . Después, unidades especiales de la Policía han logrado disolver a dos grupos violentos.

La titular del juzgado de instrucción número tres de Linares ha decidido tomar declaración por videoconferencia a los dos policías nacionales que han sido detenidos por la brutal agresión a un vecino de la ciudad. Lo ha hecho tras constatar que una concentracion de personas indignadas por la agresión ante la sede judicial preludiaba situaciones de riesgo.

En concreto, más de de un centenar de personas, en su mayoría jóvenes , han criticado la acción de los policías y han proferido insultos contra las fuerzas del orden por los hechos.

Ante esto, los detenidos han sido trasladados a la Comisaría Provincial de Jaén, donde prestarán declaración telemática desde una sala habilitada ante la autoridad judicial, que cuenta con vídeos grabados de la paliza, que han sido aportados por el propio cuerpo de seguridad del Estado .

En la elaboración del atestado han colaborado la Comisaría local de Linares y la Comisaría Provincial de Jaén, que han asegurado que colaborarán al máximo con la autoridad judicial en cuantas diligencias se practiquen para depurar presuntas responsabilidades penales. De la vía administrativa se encarga la propia Dirección General de Policía, que les ha abierto un expediente administrativo para determinar las sanciones que correspondan.

La Dirección General de Policía ha lamentado la agresión y ha mostrado su « enérgica condena » por los hechos ocurridos y por la actitud del subinspector y el agente implicados en la pelea. Al respecto, aclara que su modo de actuar no representa el trabajo diario de servicio público de hombres y mujeres del cuerpo de seguridad del Estado.