Mariscos Castellar sortea la crisis: incrementa las ventas y mantiene casi un centenar de empleos fijos

Para la codirectora general de la empresa, Josefina García Calero , la resistencia se deriva del acierto al adaptarse al nuevo escenario mediante una reorganización que ha evitado que se aplique un expediente temporal de regulación de empleo. Esto, a pesar de que la facturación decreció durante la primera ola del coronavirus (marzo-junio) por el cierre de la hostelería yla suspensión de eventos como Semana Santa, romerías y ferias .

En la segunda campaña del año, la de invierno, el mercado se recupera, lo que constituye un buen síntoma porque esta empresa consigue en diciembre el 35 % de su facturación total , que el año pasado alcanzó los 37,5 millones de euros. «Quedan dos semanas muy importantes», aclara la codirectora general, optimista porque se han incrementado los pedidos de hosteleros, de supermercados, de pescaderías y de tiendas de alimentación.

Si el incremento de las ventas no implica un aumento proporcional de la facturación es porque la materia prima se vende a un precio inferior al del año pasado y también porque en el ámbito doméstico, su actual pilar, no se consumen los mismos productos que los que adquiere el sector de la hostelería. De modo que los carabineros, las bocas, los cuerpos y las cigalas, aunque se venden, dejan paso al salpicón de mariscos y al preparado de paella.

«Hemos puesto en el mercado productos más económicos, mariscos más baratos. Hemos comprado bien para vender mejor. Sabemos que la disponibilidad económica de los consumidores no es la misma que en otros años , así que le ofrecemos un producto excelente a un precio muy competitivo», expone quien dirige, junto a su hermano Francisco , de una de las principales empresas de Jaén en términos económicos y de proyección.

En este sentido, Mariscos Castellar ha incrementado del 7 al 15 % las ventas internacionales. Y lo ha hecho en un contexto adverso, dado que un mercado importante, el del Reino Unido, se ha reducido porque en ese país su principal cliente en la hostelería, afectada por la crisis. En cambio, la empresa ha elevado las ventas en Portugal y en Países Bajos al llegar a los hogares de ambos países a través de tiendas de alimentación y pescaderías.