La juez del caso Nazarí investiga ahora al alcalde socialista de Granada por una discoteca

Además del regidor socialista , también están bajo sospecha su antecesor, el expopular José Torres Hurtado, así como tres concejales y exconcejales del Ayuntamiento de Granada , varios empresarios, arquitectos, funcionarios municipales y la sociedad privada que gestiona la discoteca en cuestión. Se trata de la sala de fiestas Prince, ubicada en el Campo del Príncipe de la capital.

La investigación parte de una denuncia interpuesta por una agrupación vecinal creada ex profeso para combatir la citada discoteca. Si bien la juez reconoce en su auto –publicado por el diario Granada Hoy– que aún se desconocen los pormenores de los hechos denunciados, la magistrada sostiene que las «características» del caso «hacen presumir la posible existencia de una infracción penal» .

Tampoco está aclarada la participación de las personas contra las que se ha abierto la investigación, por lo que el Juzgado de Instrucción 2 de Granada ha comenzado a actuar para esclarecer quiénes deben permanecer en la causa. Para empezar, la magistrada ha requerido documentación específica al Ayuntamiento de Granada ; en concreto, los expedientes relacionados con la ampliación de la discoteca acometida el pasado año, además de otros registros ambientales, sancionadores o de concesión de licencias de actividad.

La juez también tendrá en consideración la información sumarial de los litigios en los que ha estado involucrada la discoteca: un pleito de la empresa gestora contra el Ayuntamiento en febrero de 2016 por el aforo fijado –200 personas frente al millar que pedía la sala de fiestas– y otro que emprendió la Asociación de Vecinos del Realejo contra el Consistorio por permitir la reapertura de la discoteca en base a que las obras iniciadas no se correspondían con las planteadas en el expediente municipal. La magistrada descarta, de momento, citar a declarar a las personas investigadas.

Han sido los propios vecinos de la zona quienes se han encargado de investigar las modificaciones acometidas en la discoteca, porque les afectan directamente. Según han relatado a ABC fuentes de esta plataforma vecinal , la actividad de la sala de fiestas les está ocasionando problemas de salud , como ataques de ansiedad. «Mi casa vibra y me estoy yendo con los niños a dormir a casa de mi suegra», comenta con frustración una de las vecinas afectadas. «Hemos pasado de un cutre tablado a una macrodiscoteca en pleno casco histórico» , critica otra, en referencia al aforo de la sala, que actualmente ronda las 1.000 personas y antes era de 160.

Desde la plataforma insisten en que se ha incumplido sistemáticamente el plan urbanístico PEPRI del centro de Granada , dándole «apariencia» de legalidad sobre la marcha a las obras acometidas en la discoteca en una zona de especial protección : «Yo no puedo ni cambiar las persianas».

Este modo de operar sería similar al observado en otros expedientes investigados en el caso Nazarí, y no habría cambiado a pesar del cambio de gobierno en el Ayuntamiento de Granada . Las denunciantes, que han remitido hasta la fecha más de 300 escritos a diversas instituciones, están convencidas de que detrás de todo se esconde «una trama» ante la que «todo el mundo se pone de perfil»: «Nos hemos visto envueltos en una vorágine, y vemos visto que son los mismos técnicos y los mismos concejales implicados en el caso Nazarí».