El alcalde de Granada quiere acabar con las tradicionales tapas «gratis» en la capital

«No vamos a promocionar más tapas gratis, nunca más. Las tapas hay que pagarlas porque son alta gastronomía como se ha demostrado hoy« recalcó literalmente el alcalde.

El debate sobre separar en el pago la tapa de cortesía, o tapa gratis, junto a la bebida está abierto por el sector desde hace años. La propia Federación de Hosteleros de Granada sigue su estrategia en este sentido, pero el arraigo cultural de alguna manera hace vacilar a la hora de tomar la decisión.

El contexto del discurso de Cuenca , con un público en ese momento totalmente entregado a la idea, hizo que el alcalde no dudara a la hora de regalar su apoyo a ello, un defecto, el de medir sus palabras en torno al aplauso posible, afeado en no pocas ocasiones por la oposición.

Fuera del acto de la final del concurso celebrado este jueves, las críticas, sobre todo a través de las redes sociales no se han hecho esperar con reivindicaciones por parte de varios usuarios que, más allá del cambio de modelo en el pago, han sentido un ataque a la propia tradición de la tapa granadina.

El propio Cuenca ha salido a la palestra este viernes para matizar sus palabras, señalando que se han sacado de contexto y que su intención precisamente, era poner en valor la tapa a través de ese pago.

Hay que recordar que Granada está viviendo en estos años un debate de fondo sobre el potencial de su alta cocina, que no cuenta con una sola estrella Michelín , al contrario que casi todas las provincias andaluzas.

La idea de optimizar la posibilidades de la alta cocina, en parte van en el sentido económico, es decir, pagar por las tapas daría la posibilidad de mejorar la percepción del valor por parte de los consumidores.

También, cogiendo este mismo argumento, proyectaría una supuesta desaparición de la 'fritanga' o la tapa de menor calidad , minoritaria en su mayoría en la capital y acotada a zonas concretas de estudiantes o jóvenes.

El caso es que, con todo, la presión ha provocado un tweet por parte de Cuenca en el que aclara su posición y acusa a sus detractores de haber originado la «folletaica» de las tapas , sin nombrar, en este caso, su apuesta por ese cambio de modelo.