El 532 aniversario de la Toma vuelve a unir historia y tradición en Granada

Este 2 de enero de 2024, Granada se ha reencontrado con su tradición en un acto que mezcla lo civil, lo militar y lo religioso y que se ha desarrollado desde hace nada menos que 532 años. Y aunque, como todos los actos históricos, la Toma se basa fundamentalmente en hacer las cosas como manda la costumbre, siempre se producen novedades.

Por ejemplo, esta ha sido la primera vez en la historia en la que la Toma ha estado presidida por una mujer. En concreto por Marifrán Carazo, alcaldesa de la capital. También, aunque sea más anecdótico, ha sido la primera vez en muchos años en que ha participado en el cortejo la totalidad de la corporación. Los partidos a la izquierda del PSOE normalmente no han asistido, pero en este mandato los 27 concejales pertenecen a PP, PSOE y Vox.

Precisamente Marifrán Carazo se refirió a la historia y a la tradición en las declaraciones realizadas justo antes de comenzar el desfile: «Este es un día festivo que marca el calendario de los granadinos. Granada debe crecer y mirar al futuro, pero no puede perder la referencia de su historia y sus tradiciones. Sin dejar de mirar al futuro, hay que recordar también nuestra historia, que marcó la de España y diseñó el modelo actual de nación que tenemos», manifestó.

El acto comenzó poco después de las once de la mañana, cuando José Manuel de la Esperanza, teniente general del cuartel de Mando de Adiestramiento y Doctrina (Madoc), llegó a la Plaza del Carmen, sede del ayuntamiento, y pasó revista a las tropas allí congregadas, entre ellas una unidad de la siempre esperada Legión.

El recinto estaba custodiado por más de 200 agentes de la Policía Nacional, que fueron los encargados de impedir cualquier enfrentamiento entre algunos partidarios del anterior régimen –cada año menos- y grupos contrarios a la Toma que se desplazan al epicentro de la fiesta para expresar su continuidad. Unos y otros son minoritarios y los asistentes, en general, acuden para disfrutar de un día especial.

La concejal Carolina Amato (PP), encargada este año de portar el pendón real, encabezó el cortejo que a las 11,40 de la mañana se puso en marcha rumbo a la Capilla Real. Se trata de una estancia donde reposan los restos de Fernando V e Isabel I y que es contigua a la catedral, donde a las doce del mediodía, el arzobispo de Granada, José María Gil Tamayo, ofició la tradicional misa.

Después, la también concejal Rosario Pallarés, del mismo grupo político que Carolina Amato, tremoló el pendón y se procedió a la ofrenda floral ante los sepulcros reales, lo que precedió al camino de vuelta a la cercana Plaza del Carmen.

Allí, poco después de la una y media de la tarde, se produjo el momento más esperado: esa fórmula que se repite tres veces y en la que la persona encargada de tremolar pregunta a los congregados: «¿Granada?», para que ellos contesten: «¿Qué?» y continuar con el más que clásico: «Por los ínclitos Reyes Católicos, don Fernando V de Aragón y doña Isabel I de Castilla. ¡Viva España, viva el Rey, viva Andalucía, viva Granada!», vítores que también se repiten en tres ocasiones.

Un breve desfile de la Legión puso el punto final a un acto que, como otros años, ha tenido su reverso en otro punto de la ciudad. Lo convocó la plataforma Granada Abierta bajo el lema 'Por la convivencia, no a la Toma', y en homenaje a Juan Antonio Díaz, promotor de Artistas por la Tolerancia.

Tuvo lugar en la sede de la Fundación Euroárabe, en la calle San Jerónimo, en el centro de la capital granadina, y en él se leyó un manifiesto, recordando también el recital poético 'Lorca dijo no a la Toma', según ha informado este colectivo. memorialista.