El Gobierno de Pedro Sánchez autorizó pozos en el entorno de Doñana el año pasado

«Vemos en Andalucía una derecha que no niega la evidencia científica, pero que en cambio actúa como si no existiera esa emergencia climática (...) y que hasta incluso niega la legislación europea y las advertencias de la Comisión Europea. Pues yo lo digo desde aquí, de manera serena, pero también con contundencia: Doñana no se toca, Doñana es patrimonio de los andaluces, de todos los españoles y Doñana no se va a tocar», reiteró el presidente del Gobierno ante la militancia socialista.

Pero parece que el aserto de Sánchez llega tarde, porque su Ejecutivo ya ha tocado el parque nacional. El Ministerio para la Transición Ecológica autorizó en febrero del pasado año trece autorizaciones para la extracción de aguas subterráneas en Doñana, atendiendo una petición formulada por la Junta de Andalucía en 2007, bajo mandato socialista.

La autorización aparece publicada en el Boletín Oficial de la provincia de Huelva. Se trata de trece pozos en el término municipal de Almonte para captar «masa de agua subterránea», según se recoge en la citada publicación. Estas prácticas son las que pretende prohibir el actual Gobierno andaluz con su proyecto de ley, ya que solo se autorizarían captaciones en superficie.

No son las únicas prospecciones autorizadas por el Gobierno del PSOE y de Unidas Podemos. En otro Boletín Oficial de Huelva correspondiente a julio de 2022 también se recogen diversas extracciones de aguas subterráneas en el entorno de Doñana. Por otra parte, la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir ha admitido haber regularizado en la zona 544 pozos de agua y 118 infraestructuras de almacenamiento, es decir, depósitos o balsas.

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