«Ha luchado contra las olas más grandes subida a su tabla de surf, pero también contra los tsunamis que arrasan la vida cuando menos te los esperas», explicaba la presentadora Eva González antes de que el presidente del Parlamento Andaluz, Jesús Aguirre, le entregase el reconocimiento a esta joven deportista que sufrió una severa meningitis mengingocócica que la dejó sin manos ni pies.
El duro revés no le impidió seguir luchando por su sueño. En 2021 participó por primera vez en el Campeonato de Europa de Surf adaptado, que cerró con la medalla de plata. Lo tuvo que hacer en la modalidad masculina porque no había una inscripción femenina suficiente. Posteriormente logró la victoria, y también a nivel mundial. Además se coronó tres veces como la mejor de España. Y logró medalla de Plata y Bronce en los mundiales de 2021 y 2022.
La Junta pensó en ella ya no sólo por ser su mérito deportivo, sino sobre todo por ser ejemplo de superación personal. «Da igual tu condición física, mental o económica. El mar trata a todos por igual», explicaba Almagro en relación a su complicada historia de sin duda, 'final feliz': «Hace tres años salía del hospital en una silla de ruedas, sin manos ni pies, pesando tan sólo 34 kilos y mi vida dependiendo de una máquina de diálisis. Tres años más tarde estaba en California, surfeando, representando a España en un mundial. Con mis cuatro prótesis, trasplantada de riñón y subcampeona del mundo».
La joven recordaba durante la ceremonia algunos episodios de flaqueza, como cuando se lamentaba a su madre temiendo ser «una inútil toda la vida». La respuesta le dio fuerza y sentido a su vida: «¿Fue Stephen Hawking un inútil?».
Los años han pasado y su legado ya es patente, el que ahora se acrecenta al recibir una de las mayores distinciones en su tierra. No pudo ocultar su satisfacción por el emotivo momento.
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