El verano baja el paro del comercio en Córdoba un 2,6%, la menor caída en años

De acuerdo a la información que facilita el Servicio de Empleo Público Estatal (SEPE), al cierre de julio hay 3.105 parados pertenecientes al sector del comercio (no incluye a los negocios de venta de vehículos de motor y motocicletas). Esa cifra implica un retroceso del 2,6% respecto a la registrada a finales de mayo, antes de que arrancasen las contrataciones temporales estivales. Tanto en junio como en julio se dieron descensos mensuales, si bien el retroceso se concentró en el primero de ellos (-2,2%), ya que en el segundo la bajada se quedó en un 0,4%. Es habitual que la merma sea más acusada en junio.

El de 2022 es la disminución en un estío más moderada de los últimos ejercicios. Se queda a muchísima distancia de la que se dio en la capital en 2021, que fue del 14,6%. Eso sí, el clima entonces era completamente distinto. La economía de la ciudad, como la del resto de España, se encontraba inmersa en una clara mejoría tras el impacto del Covid. Ahora, por el contrario, los nubarrones se ciernen sobre este segundo semestre a causa de la guerra en Ucrania y ello puede haber llevado a que los comerciantes hayan sido más prudentes en sus contrataciones.

Si la comparación se establece con 2020, el presente verano también aguanta el cruce de datos. En el verano en el que la desescalada empezó a cuajar, entre finales de mayo y la conclusión de julio, la bajada del número de parados fue del 3%, cuatro décimas más que la registrada ahora.

El retroceso del desempleo en el sector del comercio tampoco está actualmente a la altura del que se produjo en el ciclo de la recuperación económica que siguió a la larga recesión que se desató en 2008.

Si se mira, por ejemplo, el cuatrienio que antecedió a la irrupción del Covid, se comprueba que en sus veranos el paro de este área de actividad descendió a los siguientes ritmos: 2019 (-3,2%); 2018 (-3,5%); 2017 (-4,5%) y 2016 (-5,8%). Todos esos descensos superan al de 2022.

Eso sí, el mercado laboral del comercio en la capital afronta el nuevo escenario económico adverso con el colchón de haber logrado una situación mejor que la del escenario prepandemia. Los citados 3.105 desempleados que quieren trabajar en tiendas son 203 menos que los que se contabilizaban cuando se despidió julio de 2019. El retroceso es del 6,1%. Se sitúa claramente por encima del descenso medio que se anotó el conjunto de la ciudad, que fue del 2,8% -de 33.472 inscritos en las oficinas del SAE se pasó a 32.520-.