La reforma del campo de San Eulogio en Córdoba se topa con la norma contra inundaciones

Es un efecto del «nuevo» reglamento que regula las zonas inundables, que apareció en el BOE en diciembre de 2016 . Según sus directrices, todo el Campo de la Verdad y parte del distrito Sur (así como otros barrios de la ciudad) entran en la categoría de Zona de Flujo Preferente (ZFP). Explicada de forma sencilla es el terreno (urbanizado o rural) que alcanzan las inundaciones de cierta relevancia que se producen, estadísticamente, cada cien años. El Ministerio de Agricultura y Medio Ambiente desarrolló en la etapa de Isabel García Tejerina unos sencillos visores informáticos que permiten saber qué zonas están afectadas, precisamente, para evitar sustos.

Una sencilla consulta permite comprobar que San Eulogio, como el solar del pabellón de la Juventud, se encuentran en esta zona de cautela que tiene un régimen legal especial. El asunto está generando no pocos problemas porque el Plan General de Ordenación Urbana prescribe unas cosas que la legislación estatal en materia de aguas limita. Ha ocurrido ya con personas o empresas que pretendían utilizar los bajos de los edificios plurifamiliares como viviendas, cosa que no está autorizada expresamente por la normativa, que exige que todas las casas ubicadas en estas zonas de riesgo de inundación se encuentren a una altura determinada.

El reglamento aprobado por el anterior Gobierno asegura que en la ZFP urbanizada (que comprende los suelos de las ciudades consolidadas y los que estén listos para edificarse) no pueden construirse «nuevos centros deportivos» . Tampoco pueden autorizarse iniciativas de grandes superficies comerciales, cárceles, parques de bomberos, instalaciones de protección civil o residencias para personas discapacitadas. Se entiende que en lugares con propensión a inundarse no puede haber determinados equipamientos de estas características.

La propuesta realizada por Grucal consiste básicamente en hacer de nuevo el campo de fútbol de San Eulogio, que tiene una parcela de 11.000 metros cuadrados , para conventirlo en un complejo donde se mezclen usos diversos. Una buena parte, 8.000 metros cuadrados,   seguirá siendo una instalación dedicada al deporte del balón con nuevos graderíos. Otra parte será un complejo dedicado al deporte tipo gimnasio , lo que cuadra con la definición de «centro deportivo». Y, además, se plantea una superficie comercial no especificada como uso complementario, cosa perfectamente legal, según el PGOU , si no se supera un porcentaje determinado de la superficie general.