El Pleno aprueba la moratoria de hasta dos años para las casas de apuestas en Córdoba

La medida se aprobó ayer en el Pleno prácticamente sin debate puesto que existe un consenso entre las fuerzas políticas de que es preciso frenar este tipo de negocios. Urbanismo , sin embargo, tiene que explicar cómo va a aplicar esa moratoria de la que existen pocos precedentes. El PGOU tiene una prohibición expresa que impide la apertura de hoteles en calles de primera categoría sin un marco temporal concreto. A principios de la década pasada, se aprobó una moratoria, esta sí temporal, que impedía teóricamente la inauguración de nuevos centros comerciales. Con esta medida vigente se abrió al público el centro de medianas superficies del barrio del Guadalquivir .

Ello fue posible porque Urbanismo aplicó un criterio garantista para esta actividad empresarial, entre otras razones, por las fuertes implicaciones que tenía para la Junta de Andalucía, que vendía el suelo para el centro comercial. Lo que la Gerencia tiene que decidir ahora es si aplica de la misma forma o es más duro. Las opciones son dos: una moratoria a palo seco (a partir de ahora no hay licencias) o respetar las solicitudes de casas de apuestas y similares que se hayan registrado con carácter previo a la apertura del periodo de prohibición (que fue la forma en la que se aplicó la moratoria de centros comerciales). De la misma manera, el cambio en el artículo del Plan General tiene que decidir qué ocurre con los negocios que estaban abiertos con carácter previo a la nueva redacción del PGOU con licencia válida y que no cumplen con los criterios de la nueva normativa. Los cambios son plenamente conocidos. Por ejemplo, Urbanismo quiere establecer una distancia de 500 metros entre estos negocios y colegios, institutos, equipamientos deportivos o socioculturales por lo que tendrá que definir qué pasa con los que ya operan a menos de esa instancia. Los nuevos negocios tendrán que presentar un informe de actividad con los «efectos adictivos» de la actividad empresarial en un entorno concreto, un documento que aún tiene por concretar todos sus extremos.

Urbanísticamente, la apertura de un salón de juegos y apuestas era similar a un bar con la diferencia de que no se permite el paso de menores. La nueva regulación pretende ser mucho más restrictira con aspectos como que se impedirá la solicitud de veladores. Es habitual que este tipo de negocios tengan terrazas como apoyo a la actividad de cafetería por lo que Urbanismo tendrá que dilucidar si esa medida restrictiva se aplica también a las casas de apuestas que ya operen con licencia. Otro de los elementos que se quiere cambiar es que todos los salones de apuestas tendrán que contar con una reserva de aparcamientos de uso exclusivo que tendrán que garantizar ante la Gerencia . La reserva de estacionamietos depende de los metros cuadrados de cada negocio y se aplica usualmente a los establecimientos de nueva planta. Urbanismo ya ha advertido que pretende pedirlos también a los negocios de azar que reformen edificios existentes en suelo urbano.