PERDONEN LAS MOLESTIAS

Mercadotecnia

Como «coach», el gurú Sanmartín deja mucho que desear. Pero noquea a sus rivales como nadie. Y ahí tienen a Susana Díaz

Aleix Sanmartín ojea un ejemplar de ABC en la redacción de Córdoba Á. CARMONA

15/03/2019 a las 08:25h.

Aleix Sanmartín es un gurú de la estrategia política . Es decir: un señor que te aprieta las tuercas y te afina el motor para que tu vehículo llegue primero a la meta. Todo lo demás es accesorio. Incluso prescindible. Las razones, los ... objetivos, los argumentos , los programas y hasta la pertinencia de llegar primero . Ese no es el problema de un gurú de la estrategia política . Le trae al fresco. Su cometido es poner el coche a punto y traspasar la línea de llegada por delante de todos sus rivales.

Sanmartín lo dice bien clarito en su web corporativa. «Queremos ganar. Así de simple» . Y tanto. Sin aditivos. Sin edulcorantes. Sin aderezos. Ganar es un verbo muy contemporáneo. Un verbo arrollador, que necesita de perdedores para desarrollarse en toda su plenitud. Y para ganar hace falta un buen mecánico del marketing y del discurso publicitario . Un «coach» que te diga por donde debes golpear a tu adversario, cómo debes protegerte de sus ganchos y, en definitiva, qué hay que hacer para mantenerse de pie en el cuadrilátero cuando todos te dan por muerto.

El joven Sanmartín, por lo visto, es un reputado estratega de candidatos . Se fogueó en el grupo municipal socialista hace ya unos cuantos años. Cuando Antonio Hurtado era un aspirante a la Alcaldía con pajarita y exhibía una acreditada capacidad innovadora. Eran tiempos difíciles para el señor Hurtado. Tenía enfrente a una púgil dura de pelar y con una larga trayectoria en el oficio. Se llamaba Rosa Aguilar . Quizás la recuerden.

El señor Hurtado mordió con fuerza en el hueso de las naves de Colecor y la alcaldesa le hizo una envolvente muy profesional a través de Gaspar Llamazares y la necesidad imperiosa de Rodríguez Zapatero de aprobar los presupuestos con el voto de IU. Quitadme al mequetrefe de Córdoba , debió decir la señora Aguilar en círculos monclovitas. El caso es que a Antonio Hurtado le segaron la hierba bajo los pies y apareció un día aparcado en el Senado como se arrumban los candidatos molestos.

El aprendiz de gurú tuvo que asimilar mucho aquellos días de golpes bajos . Los grandes estrategas se forjan en los márgenes del sistema, sobre terrenos embarrados y generalmente al límite del reglamento . Sanmartín debía ya de apuntar maneras y Moratinos lo fichó cuando el diplomático se hizo cargo del Ministerio de Asuntos Exteriores. Su progresión dio un salto cualitativo. Y por arte de birlibirloque se mudó a tierras mexicanas donde ha cuajado una hoja de servicios sorprendente como prestidigitador de la táctica política .

En apenas nueve años ha dirigido más de cien campañas electorales y ha asesorado candidaturas presidenciales de México y Uruguay. «Me considero un artesano de la comunicación », proclama en su web corporativa. Quizás por eso, lo fichó Juanma Moreno para su reto imposible del pasado 2 de diciembre. No sabemos qué polvitos mágicos esparció por la candidatura del aspirante popular ni si el invento de la vaca de Añora es obra de su cocina. Sea lo que sea, el señor Moreno es hoy presidente de la Junta de Andalucía contra todo pronóstico y hasta en claro desafío a la ley de la gravedad.

La campaña electoral diseñada por Sanmartín acaba de ser nominada a los Napolitan Victory Awards , unos galardones que se entregan en Washington en reconocimiento a las mejores estrategias políticas. El joven gurú de Hornachuelos debe ser un mago. Como «coach», presenta algunas deficiencias. Su cliente Moreno perdió 300.000 votos , 7 diputados y el 30% de su electorado. Pero noquea a sus rivales como nadie . Solo hay que ver a la pobre señora Díaz tendida en la lona.