Los tontos de la N-432

Un no muy lejano informe de Funcas, la fundación de las cajas de ahorro, y otros estudios de entidades bancarias, colocan ya a Córdoba entre el grupo de provincias españolas a las que la despoblación les empiezan a minar como una gota malaya . Una especie de muerte lenta pero persistente. Sangría de residentes que sería catastrófica si no fuera por los cultivos de la aceituna o la naranja, la hostelería de la costa y por los subsidios agrarios y las obras de las aceras y los llanetes que se hacían llamar del antiguo Profea (PER en sus orígenes). Todas estas circunstancias siguen fijando población en pueblos órbita de las agrociudades que pueblan, a su vez, la espina dorsal de Andalucía y que, de momento, no tienen un soberano bocado en su padrón.

Aunque las instituciones públicas hayan hecho del tema de la despoblación una especie de nuevo mantra y máster en márketing político , la realidad es tozuda y, además, ellos mismos y sus 'mayores' se encargan de ahondar en la herida que no sana. Da igual que a los planes provinciales de obras y servicios de toda la vida en la Diputación de Córdoba los quieren llamar ahora planes contra la despoblación y Estrategia 2105, que el problema sigue y se agrava. Esos recursos son los que les corresponden a los pueblos pequeños, lo vistan como lo vistan. No hay nada extraordinario en la pantomima.

La verdadera estretagia contra la despoblación de Córdoba debiera ser otra mucho más sencilla. Por ejemplo, coger todos los partidos la pancarta, como han hecho con la Base Logística del Ejército de Tierra, y cortar la carretera N-432 en Peñarroya, Espiel, Baena o Espejo y dejar de ser los tontos de la N-432. O irse a Madrid, en lugar de que vengan los ministros de turno a Córdoba a acallar rebeliones cuando se pone la cosa más tensa. Porque esa es, y no otra, la impresión que queda después del enésimo 'mangazo' que el Gobierno le da a la provincia de Córdoba con una carretera que cruza de noroeste a suresta y sigue siendo un obstáculo a su desarrollo y un campo minado de accidentes. Además de un tormento insoportable.

El estudio informativo que ha visto la luz y ha adelantado en su clara intención ABC , no es más que otro engaño a Córdoba, a la que le quieren endosar una semiautovía de segunda división, sin plazo real, por fases y para reemplazar una carretera nacional... por otra similar mientras que les dá la gana de construir el otro eje de la calzada y que veamos una autovía como las que se multiplican de Despeñaperros para arriba. No se puede tener más poca vergüenza que ponerlo por escrito. Haremos la autovía como Dios manda desde Badajoz a Zafra y luego, por fases y partes en la parte de Córdoba. Eso hasta Espiel, porque puede que usted y yo no vivamos para ver el estudio informativo de la llamada A-81 desde ese punto del Guadiato hasta el límite con Jaén.

Llevamos décadas soportando el mismo juego con una de las vías convencionales más largas que aún no se han renovado en España. Casi mil kilómetros tormentosos entre el límite con Portugal y la capital nazarí. Cuando gobiernan los socialistas, protestan los populares, y cuando éstos llegan a Moncloa, más de lo mismo, y cortes de carretera del PSOE para exigir lo que no hacen. Así, décadas haciendo el tonto. Antes lo hacía Izquierda Unida, ahora ya como se han convertido en pseudocomunistas de moqueta y coche oficial, todos calladitos.

Para colmo de males, tanto en las cabeceras de Badajoz como en la de Granada sí se viene actuando para mejorar el arranque y final (o viceversa) de la carretera N-432. El Gobierno actúa en Pinos Puente y Atarfe, o lo hace en Zafra con una variante o en las proximidades de la capital pacense y su A-5 hacia Lisboa; pero, mientras, en Córdoba, todo se estudia, se requetestudia, se pasa por el filtro ambiental y acaba caducando para volver a empezar los borradores y trabajos previos porque se han desactualizado. La bolita por aquí y la bolita por allí...

Resulta irritante de todas leer argumentos únicos de tráfico y movilidad para justificar que la autovía salga de corrido hasta Zafra y no en el Guadiato, porque hay menos tráfico. Claro, lo uno lleva a lo otro. Si es una comarca deprimida en muchos aspectos, habrá menos flujo económico y, por ende, menos tráfico . Ese argumento resulta perverso pues son precisamente esas vías rápidas las que ofrecen oportunidades a los pueblos de una comarca descarbonizada hace tiempo, envejecida y sin resortes - cuando llegaban los millones del Miner se los gastaban en locomotoras viejas y proyectos ficiticos que aún están esperando un juez y un banquillo para ser juzgados-.

Por el Guadaito no pasan ni líneas de alta tensión donde enganchan las grandes empresas ni las autovías que mueven la actividad y el comercio o el turismo. Y un municipio como Espiel, convertido por su tamaño en un milagro socioeconómico de industria de valor añadido y con un alcalde inmejorable, se ve atrapado en una red de despropósitos que aletargan sus muchas opciones futuras. Pero como Fuente Obejuna, Peñarroya-Pueblonuevo, Belmez... Y después vendrán la propia Córdoba capital, Espejo, Baena o Castro del Río .

Cuando acaben sus vacaciones navideñas la dirigencia cordobesa, les planteo que hagan el ejercicio de sentarse en una mesa (también los agentes sociales y todos aquellos que protestan por nimiedades) y diseñen de una vez una estrategia común , agresiva, unívoca, valiente -aunque se jueguen sus sillones- y en la única dirección de dejar de ser los tontos de la N-432, que es lo que somos.