La Fiscalía de Córdoba pide 4 años de prisión para un hacker que intentó estafar a Silbón por un e-mail

La Fiscalía de Córdoba, en su escrito de calificación, al que ha tenido acceso ABC, recoge que con fecha del 2 de septiembre de 2020, el director de compras de Silbón contactó telefónicamente con el gerente de la mercantil gallega que es la distribuidora habitual de la compañía cordobesa, acordando ambos que cuando se recibiera la mercacía solicitada se realizaría el pago de la misma mediante transferencia bancaria.

Al día siguiente, el dirctor de compras de la firma cordobesa recibió un email desde la cuenta de correo electrónico de la distribuidora gallega en el que ésta le informaba que esa mañana había salido la mercancía del almacén y que la recibiría al día siguiente, adjuntándole la factura.

Sin embargo, el director de compras en Córdoba respondió al email recordándole que esa factura no reflejaba el 2 por ciento de descuento . En ese momento, el acusado con ánimo de obtener un beneficio ilicito, sólo o en connivencia de otras personas no identificadas, procedió a interceptar el correo electrónico entre ambas empresas (Silbón y la distribuidora gallega).

Una vez interceptados los correos, el acusado personalmente -u otra persona no identificada por indicación del mismo- mandó otro email simulando ser la distribuidora, con copia de acuse de recibo a Silbón, en el que le informaba de que aplicaba el descuento, adjuntándole una factura falsa simulando ser el proveedor , ya modificada con el 2 por ciento de descuento aplicado, y el número de cuenta donde debía abonarse el pedido por valor de 58.104,26 euros.

Al comprobar el director de compras de Silbón que el descuento había sido aplicado, mandó efectuar el pago al departamento de de administración de la distribuidora a la cuenta indicada en el email, tras lo cual se puso en contacto con el gerente de la compañía gallega.

En ese momento, Silbón comprobó que el preceptor del dinero no había sido este sino un tercero ajeno a la transacción , y que había sido objeto de una estafa telemática al haber interceptado alguien el correo, resultando que la cuenta a la que se había realizado la transferencia era de titularidad del acusado.

De tal forma que inmediatamente, el director de compras de la firma cordobesa contactó con la entidad bancaria, procediendo ésta a bloquearla antes de que el acusado pudiera disponer del dinero transferido, por lo que no ha existido perjuicio alguno .

La Fiscalía de Córdoba considera al acusado autor de los delitos de falsedad en documento mercantil, en concurso medial con un delito de estafa en grado de tentativa, y solicita para él 4 años de prisión, y 2.700 euros de multa , o un día de prisión por cada dos cuotas impagadas.