Condena de 14 años de cárcel a un maltratador en Córdoba por doble violación y amenazas a su ex pareja

La sentencia del Alto Tribunal andaluz, facilitada a ABC por el TSJA, recoge como hechos probados que Mario L. O., el 30 de julio de 2019 se encontraba en el domicilio de su ex pareja, de Montemayor, en el cual habían convivido ambos hasta el día 26 de junio de 2019. Desde entonces, sobre el acusado pesaba una orden de alejamiento de la ex pareja, en la que se prohibía al acusado acercarse a dicho domicilio.

En la vivienda, saltándose la orden de alejamiento, el acusado durante la noche del 30 de julio de 2019 , se dirigió a casa de la víctima con quien mantuvo una discusión, en el curso de la cual, tras insultarla, con gran violencia la tiró sobre el sofá del salón, agarrándola de los brazos para vencer su resistencia, quitándole los pantalones y la ropa interior y obligándola a mantener relaciones sexuales.

Cuando ella le recriminó lo que había hecho, el acusado le dio una bofetada en la cara, marchándose a continuación la hacia su dormitorio. Al poco rato, el acusado fue al dormitorio en el que se había refugiado la mujer y de nuevo, con gran violencia se echó sobre ella, sujetándole las manos mientras le recriminaba que hubiera estado con otros hombres y, pese a que no paraba de llorar, la golpeó y logró agredirla sexualmente de nuevo.

A continuación Mario L. O. se dirigió a la cocina donde se hizo con un cuchillo de grandes dimensiones y con él se dirigió a su ex pareja diciéndole que la tenía que matar a ella y a toda su familia, originándose de nuevo un forcejeo en el que el acusado vuelvió a golpear repetidamente a la mujer.

Como consecuencia de dichas agresiones ella resultó con múltiples lesiones en brazos, codos, en hemitórax superior, mamas , además de una herida contusa que figura una mordedura , una en región cervical y otra en cara posterior de hombro derecho y tres excoriaciones en el glúteo izquierdo, que tardaron en curar siete días.

La siguiente noche a los hechos, pese a tener una orden de alejamiento de la vivienda, el mismo 31 de julio sobre las 22.30 horas fue a Montemayor y avistó a una hija de su ex pareja a la que persiguió hasta que ésta se refugió en casa de su abuela.

El tribunal le ha condenado a 12 años de prisión por un delito continuado de agresión sexual, nueve mese s de prisión por amenazas leves en el ámbito análogo al conyugal, la misma pena de 9 meses por lesiones leves, a lo que se suma un año de prisión por un delito continuado de quebrantamiento de medida cautelar.

El condenado, además de tener que llevar una pulsera telemática para controlar la prohibición de acercarse a la víctima, deberá abonar a la víctima 12.000 euros en concepto de indemnización por los daños morales que le ha causado, así como 280 euros por las lesiones inferidas a la misma.