Cajasur, el banco de Córdoba, cierra 2020 con unos beneficios de 12,4 millones

Cajasur vuelve a dar beneficios un año más , aunque no es ajeno a los resultados del conglomerado al que pertenece. En 2020, la entidad comunicó que éstos habían sido de 22 millones.

El banco cordobés se ha caracterizado por su buena marcha desde que BBK , una de las entidades financieras que forman Kutxabank, compró Cajasur en 2010 , después de que se produjera su quiebra y el Banco de España interviniera lo que entonces era una caja de ahorros. La gravísima situación de aquel momento se plasmó en que en el señalado 2010 arrojó pérdidas por valor de 1.139 millones .

En 2011 , primer ejercicio completo de los nuevos propietarios, ya logró un modesto resultado positivo e inició una senda positiva que se prolonga hasta la actualidad .

Las cifras de 2020, sigue el comunicado remitido a los medios por Kutxabank, vienen marcadas por un ejercicio completamente alterado por la pandemia , y con el cumplimiento de los principales objetivos que se había fijado este conglomerado financiero principio de año, en parámetros como crecimiento de los márgenes, mejora de la calidad de los activos, afianzamiento del liderazgo en solvencia o transformación digital.

Sin embargo, advierte Kutxabank, en un contexto de severa incertidumbre sobre el alcance definitivo que tendrá la crisis sanitaria en nuestra economía, el grupo ha optado por «mantener un criterio de máxima prudencia a la hora de dotar las coberturas». Por ello, ha destinado un total de 457 millones: 346, como se ha indicado, con cargo a resultados del ejercicio, y otros 111 deducidos del capital, en cumplimiento de la nueva recomendación supervisora para alcanzar una cobertura progresiva de hasta el 100% de los activos dudosos. En conjunto son 325 millones más que en el mismo periodo de 2019 . Esta política de provisiones ha condicionado el beneficio neto alcanzado en 2020, que se ha situado en los ya señalado 180,3 millones.

El presidente de Kutxabank , Gregorio Villalabeitia, ha valorado el ejercicio pasado como « extremadamente complejo , un auténtico test de resistencia para el sector financiero, que hemos superado con solidez» . «Hemos dejado patente una vez más la fortaleza y escalabilidad de nuestro modelo de negocio, a la vez que hemos mejorado nuestra posición relativa en el sector», ha añadido.

En un contexto caracterizado por el desplome sin precedentes del PIB, el incremento de la tasa de paro o la caída continua de los tipos de interés, Kutxabank indica que la solidez de su modelo de negocio bancario se ha reflejado en la estabilidad de sus ingresos bancarios recurrentes que, con 1.076,9 millones, se sitúan en línea con los resultados alcanzados en 2019. Destaca que cerca del 50% de dichos resultados proviene de ingresos diversificados no dependientes de los tipos de interés.