El Ángel Ximénez Puente Genil, un invitado a la fiesta del título del Barcelona (37-21)

Salió el equipo de Paco Bustos con la intención de ponérselo muy complicado al Barcelona . Ya lo hizo en la primera vuelta en el Miguel Salas. De hecho, ha sido el único rival que le ha dejado por debajo de 30 goles de anotación en un partido de esta temporada. Incluso, ha sido el único en caer por nueve o menos goles de diferencia ante el conjunto culé, con la excepción del Bidasoa (perdió por ocho).

Sorprendentemente, el Ángel Ximénez consiguió que el Barcelona fallase sus cuatro primeros ataques. Con esa sensación de volver a estar muy fuerte en defensa logró poner incluso por delante en el marcador. Para frotarse los ojos. Colocó un interesante 0-2 en el electrónico. Incluso, mantuvo la ventaja con un 1-3. Ahí acabó el espejismo.

El técnico del Barcelona pidió tiempo muerto. Lo que pasó después fue una exhibición en plan apisonadora del equipo catalán. Para acabar con cualquier duda. Anotó un contundente parcial 7-0 para tomar una cómoda renta de cinco goles 8-3.

Bustos respondió con la misma moneda. Abroncó a sus pupilos por la falta de intensidad en ataque y en defensa en esa fase del encuentro. La reacción le llevó a un 0-2 para enmascarar por momentos la superioridad local (8-5).

Ya concedió más el Barcelona. Se convirtió en un rodillo en ataque, mientras al Ximénez ya le costaba cualquier ataque. Respondió con otro parcial 3-0 para dejar la renta en seis goles de distancia (11-5). A partir de ahí, el conjunto catalán y el equipo de Puente Genil intercambiaron algún golpe hasta llegar con 18-8 al descanso.

Volvió a salir enchufado el Ángel Ximénez con un intercambio de 2-2 al inicio de la segunda mitad (20-10). Curiosamente, el presidente Joan Laporta apareció por el palco del Palau Blaugrana para estar presente en la celebración de otro título de campeón de la Liga Asobal del Barcelona . Como regalo, el equipo culé puso la máxima ventaja en el marcador, doce arriba (22-10).

Pero, el Ximénez tiene mucho orgullo como para dejarse llevar en su mejor temporada en la máxima categoría del balonmano nacional. Por ese marcó su mejor fase del duelo para firmar un parcial 0-4 y colocarse a ocho (22-14) , un resultado más realista.

Sin embargo, el ritmo de los contragolpes locales eran imparables para el Ximénez . Por eso llevó la desventaja hasta los 15 goles (30-15), doblándole en el marcador. Incluso, se amplió esa ventaja, hasta un máximo de 16 goles de diferencia en contra . Con el choque y el título resuelto, el electrónico al final se quedó en 37-21.