Las últimas procesiones de Córdoba en recuperarse después de la pandemia

Todo comenzó el 18 de septiembre, cuando se pusieron en la calle la Divina Pastora y la Virgen del Rayo sin ninguna restricción fuera de las mascarillas. A partir de entonces llegaron las demás, desde el Socorro y el Amparo hasta la Semana Santa, San Rafael, el Carmen y el Tránsito, entre otras.

Hay procesiones, sin embargo, que todavía no se han recuperado, y lo harán en pocos días. Una de ellas es la de Nuestra Señora de la Fuensanta, copatrona de Córdoba. A principios de septiembre de 2021 la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento todavía no tenían el protocolo con que las procesiones podrían salir a la calle y la Agrupación de Cofradías decidió actos claustrales.

Así, la Virgen se trasladó de forma privada a la Catedral, y el día que tendría que haberse hecho por las calles se hizo el Vía Lucis de los jóvenes por el Patio de los Naranjos. Al día siguiente fue la misa en el primer templo, en la víspera de la Natividad de la Virgen, y el 8 de septiembre Nuestra Señora de la Fuensanta ya estaba en su santuario.

Curiosamente, a la misma hora sí había una imagen en las calles de Córdoba, un año y medio después. Era la Virgen de la Estrella en su rosario por las calles de la Huerta de la Reina, que se celebra de forma tradicional en ese día.

El día 12 tuvo que haber salido la Virgen de Villaviciosa, y así lo solicitó su hermandad con la antelación debida. En agosto se anunció la suspensión de la procesión con una nota en que la hermandad con sede en San Lorenzo por primera vez deslizó el descontento de no obtener respuesta de la Administración ante la mejora general de la evolución de la pandemia.

No consiguió salir, pero sí tendrá que hacerlo al fin este año el 11 de septiembre, tres años después de su última procesión. A la lista se tendría que sumar también la Virgen de la Victoria, titular letífica de la Entrada Triunfal, que antes fue en su paso de palio.

Su hermandad decidió no intentar su procesión el año pasado, pero este año no habrá impedimento sanitario. Desde el 18 de septiembre salieron todas las previstas (excepto las que suspendieron por la lluvia en Semana Santa) menos una: la del Niño Jesús de la Compañía, que tuvo que haber sido el 2 de enero, en un momento en que la sexta ola del Covid se había recrudecido. La procesión se suspendió y tendrá que esperar a 2023.