Pasión en Córdoba
Rocío 2023 | El Simpecado de Córdoba pone la alegría a la tarde gris entre paraguas
La hermandad parte de San Pablo en su despedida de la ciudad en una jornada en la que la lluvia de tormenta hizo su aparición
El jueves de salida, el anhelo de la hermandad del Rocío de Córdoba
Con el cielo gris, lluvia y los ecos recientes de tormenta se desató la alegría de ser los primeros en ponerse en camino hacia el Rocío. La hermandad del Rocío de Córdoba siguió su guion establecido y al filo de las seis de la ... tarde comenzó su peregrinación.
La alegría y las sonrisas en las caras de los integrantes del cortejo lo decían todo. El jueves de salida desde la Real Iglesia de San Pablo lo tuvo todo: emoción, devoción y ambiente festivo, al principio entre los paraguas del público y con chubasqueros y plásticos para salvaguardar al Simpecado y los estandartes del cortejo.
Son elementos que no faltan nunca en este largo camino, de nueve jornadas, así que tampoco este jueves. Y también se sintió satisfacción porque llegaron las anheladas lluvias, tras muchos rezos y la procesión de rogativas a San Rafael de primeros de mayo.
Rocío 2023 | La lluviosa salida de la filial de Córdoba, en imágenes
La tan ansiada agua se ha colado en la salida del Simpecado de la hermandad filial del Rocío de Córdoba de la iglesia de San pablo que pone rumbo ya hacia la aldea de Almonte como primera en abrir el camino
La procesión del Rocío tuvo, como siempre, pinceladas de iniciación, como todos los ritos: el de los niños. Esta vez sólo unos pocos, que a modo simbólico, fueron presentados ante el Simpecado ya entronizado en la carreta, ante la puerta principal de San Pablo. El año pasado, en tarde soleada, sí pudieron ser muchos más pequeños.
Es el primer camino como hermana mayor de Guadalupe Grande, que vive todos los años esta tradición en el seno de la corporación, pero en esta ocasión lo disfruta desde este puesto.
El cielo gris propició que la jornada rebosara colorido en los coches de caballo, los trajes de los participantes y las flores que inundaban la carreta.
Pinsapo, como suele ser habitual cada primavera, adornó el altar itinerante para esta partida con orquídeas, claveles bicolor en tonos buganvilla y morado, rosas de jardín naranja, proteas, cártamo e hipericum, entre otras variedades. Mucha riqueza de colores y aromas presentó la carreta.
El mayo cordobés habitó en la carreta, con astromelias, delphinium, rosas, peonias, el clásico clavel y el romero típico del camino.
San Rafael en la parte trasera de carreta los protege y guía en su viaje. Los rocieros sintieron emocionados el adiós de una ciudad entera, el abrazo de muchas hermandades, que les deseaban lo mejor durante su peregrinar al Rocío. Por eso comparten simbólicamente la misma luz que alumbró a sus titulares en Semana Santa.
Rocío y Lágrimas (Perdón), Palma (Entrada Triunfal), Piedad (Prendimiento), Dulce Nombre (Vera-Cruz), Mayor Dolor (Calvario), Piedad de las Palmeras, el Amor (Pasión), la O y la Estrella fueron algunas de las que aportaron sus cirios.
El Rocío de Cabra, la devoción a la Blanca Paloma pone rumbo a la aldea
La hermandad, fundada en 1977, celebra el viernes su misa de romeros antes de iniciar su peregrinación a tierras almonteñas
Y, a su vez, quienes asistieron a este derroche de cantos, entre flautines y tambores, se sintieron cómplices y embargado por estos aires rocieros. Emocionante fue el adiós de la Corporación municipal ante el Ayuntamiento en Capitulares.
Y también la parada ante la iglesia de San Francisco, con los detalles de las hermandades que ahí tienen su sede. Y crucial el paso por el Patio de los Naranjos y la despedida en la Catedral.
El altar itinerante presentó este año una importante novedad en el techo de la carreta, que lució completo con los apóstoles y Pentecostés. En esta nueva fase de ejecución se culminó el techo de la carreta con los arcos laterales, molduras y dovelas interiores siguiendo el diseño del cordobés Rafael de Rueda.
La orfebrería obra de los talleres de los Hermanos Fernández, de Sevilla, va en metal alternando la terminación en baño de plata y oro. Además y siguiendo la línea del resto de piezas del techo, hace presencia el esmalte en ciertas zonas de la ornamentación.
Todas las piezas están ejecutadas a través de técnicas tradicionales de orfebrería y platería, como el repujado y cincelado.
La imaginería es obra del escultor Mariano Sánchez del Pino, quien ha plasmado en relieve a los doce apóstoles en representación de Pentecostés, la fiesta litúrgica de la venida del Espíritu Santo.
Están representados de medio cuerpo y en diferentes actitudes. Van tallados en madera y policromados al óleo imitando al marfil. Todos dirigen sus miradas al Simpecado.
Mientras, los integrantes del grupo joven del Rocío cantaban pletóricos de alegría avanzando rápido por las calles «porque Córdoba se va con su Simpecado divino» hasta la Virgen del Rocío.
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