Pasión en Córdoba
El palio del Mayor Dolor de Córdoba llevará bordados con ornamentación vegetal barroca del XVIII
Los hermanos de la cofradía del Calvario aprueban el proyecto, de Juan Manuel y Fernando Chiachío y José Luis Vivas, que mantiene la pintura del techo obra de Fray Ricardo
Oración ante el Señor del Calvario de Córdoba por los 300 años de devoción
Córdoba
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Iniciar sesión... Pasada la celebración del tricentenario de la hechura del Señor, la hermandad del Calvario sitúa en el horizonte su próximo reto. Los hermanos acaban de aprobar el proyecto de bordado del palio de Nuestra Señora del Mayor Dolor en cabildo general extraordinario.
La intención de la cofradía es acometer pronto la primera fase del proyecto, según explicó el hermano mayor, Juan Hinojosa. El diseño lo firman Juan Manuel Chiachío Castro, Fernando Chiachío Romero y José Luis Vivas Cabello.
La corporación ha mantenido desde 1981, cuando la Virgen volvió a salir bajo palio, la misma línea de bambalina que diseñó Fray Ricardo de Córdoba.
El boceto respeta ese concepto, la forma y el corte de bambalina en terciopelo morado en la que se sustituirá la malla sintética actual por una en oro trenzada a mano y se mantiene la pintura del techo de palio que representa el Monte Calvario, obra de Fray Ricardo.
La obra se basa en antiguos modelos de ornamentación barroca de principios del siglo XVIII. Sigue «un diseño simétrico de un entramado de roleos de motivos vegetales, ramas, hojarascas de acantos serpenteantes y piezas florecidas de gran volumen y tamaño» acordes con la línea de otros bordados que posee la cofradía desde hace siglos y ha mantenido en los hechos más recientemente, según precisó el Calvario en una nota.
Es en ese siglo precisamente en el que la cofradía hunde sus raíces. La distribución del dibujo se ha estudiado «para que las piezas encajen en los lóbulos inferiores que contornean las bambalinas».
El motivo central de la bambalina frontal es el corazón traspasado por un puñal en plata, alusivo a la advocación del Mayor Dolor, que aportará luminosidad y originalidad.
La bambalina trasera tendrá una cartela en plata cincelada con un pasaje profético hacia la Virgen como nueva Hija de Sión, del Libro de las Lamentaciones. Las exteriores van rematadas en la parte superior por un galón bordado que le da unidad al conjunto, para sustituir la actual pasamanería.
El techo de palio lo componen dos cuerpos de bordados separados que se complementan: uno surge en todo el perímetro del palio, a continuación del galón y busca el centro, y otro a modo de cartela enmarca a la gloria que está rodeada por el mismo galón. Entre ellos deja ver el terciopelo base para que la ornamentación «no recargue el techo», deje aire y protagonismo a la gloria central.
Los bordados del palio los concibe la cofradía como una ofrenda, «demostración de nuestro amor a los tantos favores concedidos» y «para mayor gloria de Ella».
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