Las oraciones y cantos de los jóvenes de Córdoba acompañan a la Virgen de la Fuensanta a la Catedral

Renuevan y garantizan así, y con un amplísimo cortejo, el arraigo de esta devoción popular que se sitúa a principios del siglo XV. En el año 1420, el cardador de lana Gonzalo García paseaba por aquellas tierras baldías. Tenía gravemente enfermas a su mujer y a su hija y se le apareció la Virgen indicándole que cogiese agua de la fuente. Y logró la asombrosa curación.

Desde entonces la fuente santa ha sido lugar de peregrinación y fe, y la Virgen fue coronada canónicamente en 1994, en reconocimiento al fervor que despierta.

Este martes la imagen y el Niño han ido ataviados con un manto de bolillos en hilo de plata y forro azul marino realizado en una sola pieza en el año XVIII por Soledad García y vestida por José Ignacio Aguilera. En azul y blanco, como los azulejos de su santuario.

Rosas blancas y orquídeas a sus pies han sido el ornamento floral en las andas. «Madre mía, mírame». De este modo han comenzado los cantos al son de guitarra con los que el coro ha elevado sus plegarias a la Virgen.

El rosario ha puesto el broche al primero de los días grandes que se viven en torno a la copatrona de Córdoba. La Virgen, desde por la mañana y también por la tarde, ha recibido el calor de sus devotos del barrio, que le han ofrecido flores. Un sinfín de visitantes, entre ellos, los de parroquias y residencias de mayores, se han acercado a honrarla.

«Un ambientazo, una auténtica fiesta«. Así resumía el párroco, Ignacio Sierra, en declaraciones a ABC cómo se ha vivido la jornada en el templo. Previamente al rosario de los jóvenes, el sacerdote, bendijo como es tradicional las aguas del Pocito.

Este año han sido 600 botellas de agua bendita del Pocito las que se reparten entre los que lo desean. La eucaristía, en la que ha participado la juventud de la Delegación Diocesana, antecedió al rosario público.

Este miércoles, tras dos años en blanco por culpa de la pandemia, la Agrupación de Cofradías retoma la procesión de su patrona entre la Catedral y el santuario, a partir de las 20.30 horas, con el itinerario habitual, con Juan Berrocal de capataz y la banda de música del Maestro Tejera.

Músicos de la banda de cornetas y tambores de la Fuensanta custodiarán a la imagen y, a su llegada al santuario harán los 'Toques de Fuensanta', unos acordes de marchas antiguas. Será el regreso oficial de esta formación.