José Ángel Cervera (Presentación al Pueblo): «Queremos estar en dos años en la Catedral de Córdoba»

-Su junta de gobierno integra a veteranos y jóvenes. ¿Cómo es?

-Es una junta de gobierno que tiene una riqueza bastante fuerte porque están integradas la juventud y la veteranía. Pero son jóvenes que algunos llevan con nosotros desde la venida del Cristo, que empezaron cuando tenían doce o trece años y ahora han acabado sus carreras. Y los otros son personas que llevan en la hermandad desde antes de la venida del Cristo.

-¿Qué objetivos tiene con este equipo?

-Lo primero es seguir el engrandecimiento humano de la hermandad, que sigamos creciendo en número de hermanos, en cantidad y calidad, porque los hermanos son la mayor riqueza que tiene una cofradía. Gracias a ellos vivimos y podemos realizar todos nuestros proyectos. El segundo, el engrandecimiento patrimonial. Queremos en dos años estar en la Catedral y para eso necesitamos un guion propio. Y, por supuesto, la venida de la Virgen. También tenemos ahí el estreno de bocinas, guion sacramental. Lo más inmediato es el estreno de los seis arbóreos que lleva el paso (se está haciendo el diseño) y, si da tiempo también, empezar el tallado del paso.

-¿Algún otro pilar importante para su mandato?

-También queremos potenciar muchísimo los cultos. Como somos una hermandad sacramental, no los concebimos solamente en la calle, sino a nuestro máximo titular, el Santísimo Sacramento. Para eso el día de la jura de cargos se estrenó un juego de atriles, guardabrisas, paños como engrandecimiento del patrimonio litúrgico, que para nosotros es muy importante.

-¿La llegada en procesión a la Catedral será entonces en 2024?

-Nuestra idea es en 2023 aquí y en 2024 la Catedral. También va a depender de la Agrupación de Cofradías, del resto de hermandades. Tenemos claro que no entramos dando codazos ni imponiéndonos. Va a depender de cómo se haga dentro de la Agrupación. Nuestro interés está y todo el mundo nos está preguntando el día. No tenemos ningún día pensado. Hay que ver qué días están más libres. Y hay que ver si se produce el cambio de la Madrugada y del Sábado Santo (que no creo), pero si se produce habrá muchos cambios de horarios, de hermandades, de días. Pero queremos que sea en la Semana Santa de 2024. Máximo, en la de 2025. Por número de hermanos, por cortejo, por patrimonio. Incluso a nivel patrimonial lo tenemos todo: los ciriales, las bocinas, aunque algunas cosas no las estamos procesionando por el barrio.

-¿Cómo discurre el proyecto de ampliar la puerta lateral de la iglesia de San Vicente Ferrer para la salida del paso?

-Estamos en contacto con el Ayuntamiento. La documentación que nos ha sido requerida ha sido entregada. Por ambas partes hay muchísimo interés en conseguirlo. Y dos veces que se nos han pedido unas aclaraciones o correcciones, han sido subsanadas y entregadas. Estamos a la espera de ver qué nos dicen. Salir por esa puerta que tenemos actualmente no es ya sólo la incomodidad para el paso, también para los hermanos: los nazarenos salen muy ajustados. Cuando metas las insignias y los atributos, es complicado. Me gustaría resaltar la colaboración de nuestro párroco, Pablo Garzón, en el tema de la puerta, en los cultos. Es un sacerdote íntegro y hemos tenido una gran suerte porque siempre que vamos a él hemos tenido una colaboración. Creo que espera mucho de la hermandad.

-¿En qué momento ve a la hermandad actualmente?

-La hermandad de Cañero está muy, muy pujante. Estamos ya más de 700 hermanos, muchísima juventud, el barrio ilusionado y muy volcado con la hermandad. De hecho se demuestra en la salida: cada vez más hermanos colaborando en todo. Uno de los grandes pilares de nuestra hermandad es que los hermanos ponen sus profesiones al servicio de la hermandad. En el número de costaleros hay lista de espera para poder salir con nosotros. Cada año rebasamos las expectativas del año anterior en el número de hermanos que procesionan. Y sabemos que no hemos tocado techo porque muchísimos hermanos nos dicen que ellos vestirán el hábito nazareno cuando vayamos a la Catedral. Y en eso estamos.

-El Sábado de Pasión de este año salieron por primera vez con túnicas de cola. ¿Respondieron bien los hermanos a la llamada de la cofradía de adquirirlas en propiedad?

-Sí, de hecho hubo que hacer más. Nuestra hermandad va a estar ocho horas y media en la calle. Es lo que calculamos en ir a la Catedral y volver. Entonces dijimos vamos poquito a poco. Pero hubo que encargar más. Este año la hermandad ha encargado 20 túnicas nuevas. Y estamos a la expectativa de un año difícil porque escuchamos que estamos entrando en crisis. Hemos entrado esta semana en recesión. Este año a nivel económico la hermandad está saneada, no nos gusta tener deudas. No sabemos cómo van a responder en esta época de crisis los hermanos.

-¿La intención es seguir ampliando el misterio?

-Tenemos a nuestro sagrado titular, tenemos a Pilato y a un romano. Cuando vino nuestro Cristo, incluso había gente que quería que procesionara solo, porque tenía tanta fuerza, tanta unción... Pero entonces no sería la Presentación al Pueblo. Teníamos claro que tenía que haber un Pilato y un romano. Ya se ha conseguido. El romano vino a la hermandad a través de una adquisición y es de manera temporal, es de un imaginero de Huelva. Va empujando al Cristo. El misterio queremos que lo acabe Javier López del Espino, que con la carrera artística que está llevando es como para no estar contentos con él. Él lo sabe, ya hay una amistad personal y va a ser Javier. Ahora la próxima imagen que venga va a ser María Santísima Reina del Cielo y Misericordia. La idea que se está barajando es una nueva.

-¿Qué línea estética seguirá la Virgen?

-Siempre le digo a los hermanos que tenemos un Cristo sufriente de los Afligidos, de talla completa, muy, muy sufriente. No le puedo poner una Virgen niña a su lado. Yo que vengo de la Virgen del Rosario, de la Expiración, que tengo un titular impresionante a nivel artístico y de talla en Córdoba, tiene que ser una Virgen que demuestre la madurez. Una madurez que sea mujer, mujer. La Virgen tenía 48 años cuando Cristo muere. Si tuviera que elegir, siempre lo he dicho, la Nazarena de Córdoba, la Amargura de Sevilla, las Angustias de Córdoba: será una mujer madura que represente el dolor de la muerte de un hijo injustamente acusado y que a la vez transmita dulzura como madre. No sé si pido mucho.

-¿Hay algún plazo para incorporarla?

-Primero sería acabar el guion. Estamos ya con los diseños de los arbóreos y la talla de maniguetas. Primero acabar el misterio. La Virgen se traerá, procesionará en Córdoba, pero no en carrera oficial. Tendrá sus cultos, su rosario vespertino, pero no serán dos pasos al mismo tiempo. Primero acabamos el paso del Señor y luego el otro.

-¿Y en cuanto a la obra social?

-A nivel social también se está haciendo bastante: va a haber una campaña recogida de productos sanitarios (los días 4 y 5 de noviembre). La crisis está afectando muy fuerte a las clases más humildes, y las hermandades tenemos que estar ahí. Si no, no seríamos una hermandad. Nuestro objetivo es servir a la sociedad en el ámbito en el que estamos. No puede ser todo a nivel patrimonial y artístico. Entonces estaríamos fallando como cristianos y como personas. Tenemos que mirar a la gente que sufre. Uno de los proyectos nuestros es potenciar mucho la labor social, que de hecho se ha reforzado con tres diputados.