Isidoro Moreno disecciona la Semana Santa andaluza y alerta de que «lo ritual se está convirtiendo en rutinario»

La obra, editada en Almuzara, posee 608 páginas en las que Moreno reúne tres importantes bloques de su producción: desde sus primeros libros sobre el tema en 1974 y 1982 (en sus reediciones ampliadas de 1999 teniendo en cuenta la globalización y la reactivación de las identidades colectivas) hasta reflexiones actuales de diversa extensión en ponencias y prensa sobre la creciente oficialización y mercantilización de la fiesta.

En los últimos 25 años esta fiesta está en «un momento crítico porque, aunque los puros datos numéricos hablan de un momento de esplendor, quizá como nunca, hay un problema: la posible desnaturalización del fenómeno», apunta.

Las cofradías más antiguas tienen cinco siglos de existencia en los que han tratado de preservar su autonomía. «Actualmente, esto se ha revertido y las hermandades tienen una actitud de docilidad y sumisión acrítica respecto a los poderes establecidos: eclesiástico, político y económico».

Por otra parte, señala que «lo ritual se está convirtiendo en rutinario» con la «inflación de procesiones magnas extraordinarias y misiones: Cuando un fenómeno se saca de su contexto, aunque parezca que tiene mucho éxito, puede morir de éxito porque crea una fatiga».

Procesiones extraordinarias

«La continua ocupación del espacio público, de las calles, debilita el fenómeno de la Semana Santa, no lo fortalece»

Isidoro Moreno

Pone ejemplos concretos: «En vez de una semana precedida por la Cuaresma, prácticamente ya invade hasta la Navidad. El año pasado en Sevilla las imágenes más importantes de la ciudad pasaron por las calles debajo de las luces de Navidad». Asegura que eso no es una mera anécdota, sino la prueba de que «la continua ocupación del espacio público debilita el fenómeno, no lo fortalece».

En sus escritos aboga por el uso del término de religiosidad popular en detrimento del de la piedad popular porque «son dos cosas diferentes. La jerarquía eclesiástica ha abandonado el primero porque la piedad popular es lo que responde a la ortodoxia pura tal como es definida por la autoridad eclesiástica, mientras que la religiosidad es algo más amplio que tiene que ver con la devoción cristiana, pero tiene aspectos que escapan de la ortodoxia: paraliturgia, espontaneidad».

Durante cinco décadas, Isidoro Moreno, antropólogo sevillano de reconocido prestigio, ha analizado en profundidad esta celebración desmontando mitos, desvelando historias silenciadas y explorando sus diversas dimensiones y significados.

Aquel libro de 1974 que conforma el primer bloque de éste más reciente fue la primera aproximación desde la Antropología para entender el fenómeno de las hermandades andaluzas.

Con una mirada crítica, «distinta pero no distante», puesto que pertenece desde niño a la hermandad de los Negritos de Sevilla y conoce la Semana Santa desde dentro y como antropólogo, Moreno invita a rechazar lo que define como secuestro interpretativo de la Semana Santa.

A su juicio, hay que entenderla en sus diversas dimensiones y como un ámbito abierto a todas las sensibilidades en el que se reproducen identidades colectivas y se reflejan tensiones que son las de la propia sociedad que la organiza y la vive.

Para él «la apropiación por una institución de un fenómeno que es pluridimensional no es correcta, reducir las hermandades a que sean únicamente instrumentos de evangelización es empobrecerlo».

Para Rafael Zafra, que ha ejercido de presentador en este acto, la obra es un «tres en uno» con sus escritos fundamentales en los que refleja todos los prismas de la Semana Santa: cultural, antropológico, religioso y el sentido de identidad del andaluz.

«Moreno ha sido un referente para muchos cofrades como yo porque él abre la Semana Santa a todos los matices y lleva a entender lo que es la Semana Santa andaluza», que ya estableció en 'La Semana Santa de Sevilla: Conformación, mixtificación y significaciones', ilustra Zafra.

Isidoro Moreno Navarro, natural de Sevilla, 1944, es una de las figuras más destacadas en el estudio de la cultura e identidad andaluzas. Desde 1967 y durante 50 años ha sido docente e investigador en la Universidad de Sevilla.