Pasión en Córdoba
La fiesta del Perdón, de Asís a Córdoba a los pies de la Virgen de los Ángeles
La hermandad del Císter y los capuchinos celebran el 2 de agosto una de las citas más importantes para los franciscanos
La solera del Corpus Chiquito en la hermandad del Císter de Córdoba
Córdoba
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión«Hermanos, quiero enviaros a todos al Paraíso y os anuncio una gracia que he obtenido de la boca del Sumo Pontífice». El 2 de agosto de 1216, San Francisco de Asís habló así a la multitud que se había reunido para escucharle. Era ... la indulgencia plenaria para todos los que fueran confesados y comulgaran en la iglesia de la Porciúncula.
La jornada se recuerda en los templos franciscanos de todo el mundo y en Córdoba con especial intensidad en el convento capuchino del Santo Ángel, de la mano de la hermandad del Císter, junto a su titular, Nuestra Señora Reina de los Ángeles en sus Misterios Gozosos.
Es el día del Perdón de Asís, que nació en 1216, cuando San Francisco estaba en oración y se le apareció el Señor. Fue tan audaz de pedirle algo: «Ruego que todos aquellos que, arrepentidos y confesados, vengan a visitar esta iglesia, obtengan un amplio y generoso perdón, con una completa remisión de todos los pecados».
Los jóvenes del Císter, la Paz y la Divina Pastora forman un grupo de adoración de la cruz en Córdoba
Luis MirandaEl primero de los encuentros, que incluirá reflexión, oración y espiritualidad, se celebrará este viernes
Dios se lo concedió y Francisco fue inmediatamente al Papa Honorio III para conseguir la indulgencia. Aquel gran perdón se proclamó el 2 de agosto de 1216 ante los obispos de Umbria y una gran multitud y se repite cada año.
La hermandad del Císter tiene ya dispuesta a su imagen fundadora, a la Virgen de los Ángeles, a los pies del altar mayor. Preside la jornada del 2 de agosto, pero también la víspera. El Jubileo se puede ganar desde la tarde del día 1 hasta la misa que se celebra este miércoles día 2.
Para ello es necesario confesarse «con sincero arrepentimiento y verdadero deseo de salvación, antes o durante el día 2», y ese debe hacer en alguna iglesia franciscana o templo dedicado a la Virgen María en su advocación de los Ángeles. Después hay que participar en la misa, comulgar y rezar el Padre Nuestro, el Credo, el Ave María y el Gloria por las intenciones del Papa.
Este miércoles 2 de agosto a partir de las 18.00 horas los frailes capuchinos estarán en la iglesia para administrar el sacramento de la confesión a los hermanos de la cofradía y cristianos en general que quieran. Se expondrá el Santísimo, se rezarán las vísperas y el rosario, habrá bendición y misa a las 20.00 horas.
Como recordó Alfonso Muñoz, miembro de la junta de gobierno de la cofradía, su fundador, Fray Ricardo de Córdoba, insistía mucho en esta fiesta, que forma parte del núcleo del carisma franciscano. Por eso forma parte de sus reglas y está en la gloria del techo de palio de Nuestra Señora Reina de los Ángeles en sus Misterios Dolorosos. La pintó el mismo Fray Ricardo.
Quienes acudan verán que en las flores que hay a los pies de la Virgen abundan las rosas encarnadas y blancas, y es por un motivo. Al principio el Papa, ocupado con las Cruzadas, no quería atender la petición de Francisco, pero Dios y la Virgen se le aparecieron y le dieron unas instrucciones.
Debía llevar seis rosas que habían brotado de una zarza, tres blancas y tres encarnadas. No era un número al azar, sino el de la Trinidad. «Te otorgo lo que solicitas; y sea el día aquel en que mi apóstol Pedro, encarcelado por Herodes, vio milagrosamente caer sus cadenas», dijo Jesús. Es el día 1 de agosto y por eso la indulgencia en la víspera del que también se llama Perdón de las Rosas.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete