Salud tramita una sanción a la taberna la Sacristía por la intoxicación con montaditos de pringá

Así lo han confirmado este martes a Europa Press fuentes de la Junta, recordando que los inspectores calificaron las «deficiencias detectadas» en la taberna como «graves» por considerar que podían suponer un peligro con posible riesgo para la salud, proponiendo la incoación de procedimiento sancionador si se estimaba oportuno.

Noticia Relacionada

Intoxicación alimentaria en Córdoba: la familia de la fallecida no descarta emprender acciones legales

Davinia Delgado

«Por el momento, estamos sopensando qué hacer y a la espera de más información», apunta el marido de la afectada

Como consecuencia de ello, en Salud se estimó que la documentación aportada por los inspectores debía «ser ampliada y detallada, al objeto de valorar todas las circunstancias del caso concreto», y hacerlo «con la mayor precisión posible».

Se trataba de analizar «los hechos susceptibles de motivar la incoación de un procedimiento sancionador, la identificación de los sujetos responsables y todas las circunstancias relevantes», habiendo determinado ahora Salud, tras cerrar la investigación, el inicio efectivo del procedimiento sancionador, que ya se está tramitando.

La Consejería de Salud y Consumo ya señaló en su momento, tras conocer el informe de los inspectores, que las «deficiencias» detectadas en el caso de la intoxicación con los montaditos con pringá «se asocian a todo el proceso seguido el día que se produjo el brote», el pasado 4 de enero, el cual se unió a «un contexto de tensión por las condiciones higiénicas y de manipulación».

Noticia Relacionada

El dueño de la taberna investigada en Córdoba alega que se consumieron productos traídos de fuera

ABC Córdoba

Defiende que vendió 55 por encargo para un local exterior donde fue una de las celebraciones con afectados y otros cien consumidos en su establecimiento que no han tenido incidencias

Como ya publicó ABC, la Ley de Salud Pública de Andalucía, aprobada en 2011, establece tres niveles de sanción. En el caso de infracciones leves, se pueden fijar en hasta 3.000 euros. Si se tipificara lo sucedido como una vulneración de la normativa grave, la horquilla iría entre los 3.001 y los 15.000. Por último, en el caso de que se determinará como muy grave, la multa se puede mover entre los 15.001 y los 600.000, «pudiendo rebasar esta cantidad hasta alcanzar el quíntuplo del valor de los productos o servicios objeto de infracción».