Higiene pública
Sadeco y una empresa privada intentan parar la plaga de ratas en el barrio del Realejo
La firma particular actúa en el interior del Palacio de los Guzmanes mientras que la pública se centra en todo el exterior de la casona cerrada
En vídeo, las ratas siguen campando a sus anchas por el Realejo
Así es la plaga de ratas instaladas en el palacio de los Guzmanes
Equipos de Sadeco frente al palacio de los Guzmanes
La plaga de ratas que lleva años campando a sus anchas en el Realejo tiene ya respuesta química como consecuencia de la presión social que existe en la zona. Una empresa privada y la firma pública Sadeco han inicio trabajos de desratización dentro y ... fuera del Palacio de los Guzmanes con el objetivo de parar una situación que ponía, lógicamente, de los nervios a vecinos y comerciantes.
La empresa privada, contratada por la propiedad, está trabajando en el interior del Palacio de los Guzmanes, un edificio enorme que coge casi la manzana completa que da a la calle Manchado. El inmueble es el foco principal de las ratas desde que desapareció la colonia de gatos callejeros que las mantenía a raya.
Sadeco, por su parte, está trabajando en toda la zona inmediatamente cercana a la gran casona señorial, que lleva años en el mercado con el objetivo de buscar a un inversor que reconduzca su situación de abandono. Los equipos de Sadeco, informan desde la empresa municipal, están trabajando en los contenedores cercanos y en las calles y alcantarillas del entorno con el objetivo de paliar la situación.
La empresa municipal sostiene que la ordenanza municipal actual no le da competencias para intervenir en casas construidas. El documento en vigor sí le permite, por ejemplo, acceder a solares aunque no sean de propiedad pública en el ejercicio de sus labores de policía e inspección. Se trata de una medida lógica en supuestos concretos donde existe un riesgo para la salud pública.
Defensa
La firma pública siempre ha defendido que ha trabajado con la propiedad y que se han producido tratamientos de desratización. Sin embargo, éstos no han tenido ninguna incidencia. Los vecinos y comerciantes de la zona relatan una presencia constante de ratas que se acercan o entran a los locales comerciales y los bajos de los edificios de vivienda.
Los vecinos del Realejo han dejado constancia en numerosas ocasiones de la situación con el sencillo gesto de sacar un móvil y empezar a grabar. La situación no es sencilla porque el Palacio de los Guzmanes suma muchos cientos de metros cuadrados. Solo de planta tiene más de dos mil metros cuadrados. Fuentes del mercado inmobiliario explican que la zona construida puede llegar a los 3.000 metros cuadrados.
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