El campo
Las reservas de aceite se hunden un 41% en Córdoba a pocos meses de una nueva campaña
Los representantes del sector llaman a la calma y aseguran que las cantidades son suficientes para atender al mercado
La producción de aceite de oliva en Córdoba se quedará en la mitad en una campaña marcada por la sequía
Córdoba
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Iniciar sesiónAnómalo. Así puede calificarse este año para el sector olivarero cordobés, el más importante en el ámbito agroalimentario provincial por superficie sembrada y volumen de producción y de exportación. Por un lado, la fuerte situación de sequía ha provocado que la última campaña ... acabara con la cosecha más baja en casi una década. Consiguientemente, esta menor cantidad de aceite de oliva en los almacenes ha originado que las existencias actuales sean especialmente reducidas, aunque entre los representantes de esta industria no cunde excesiva preocupación de cara a un posible desabastecimiento del mercado. La última consecuencia de todo ello ha sido una subida de los precios hasta unos niveles nunca conocidos, lo que ha originado una caída del consumo.
Las últimas cifras sobre la producción elaboradas por la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) indican que a finales de mayo las 193 almazaras repartidas por toda la provincia habían molturado 142.433 toneladas frente a las 280.000 que se contabilizaron en la temporada anterior. La Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural aseguró que los rendimientos grasos de la aceituna correspondiente a la última campaña se situaron en el 17,2 por ciento, muy por debajo de la media de los últimos años.
Quizás los dígitos más llamativos en la actualidad son las reservas oleícolas. El citado ente dependiente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación revela que al terminar el mes pasado había en los centros de producción un total de 58.970 toneladas de zumo de aceituna. Son casi 41.000 toneladas menos que hace 12 meses, lo que supone una bajada del 41 por ciento. Con este escenario, cabría preguntarse si había peligro de desabastecimiento del mercado en los cuatro meses que faltan para el inicio de la nueva campaña en octubre.
Sin embargo, los representantes del sector consultados por ABC mantienen una postura de tranquilidad a este respecto. La gerente de la Asociación Cordobesa de Almazaras Industriales (Acora), Macarena Sánchez, apuntó que «es lógico que las existencias en las almazaras hayan disminuido con respecto a la campaña pasada, teniendo en cuenta que el ritmo de salidas mensuales ha sido bueno». En su opinión, «no hablaría de problema de desabastecimiento, sino de equilibrio entre oferta y demanda, pues la menor disponibilidad de producto provocará un incremento de precio que se mantendrá hasta el nivel en el que el consumido sea capaz de asumirlo».
Adaptar los precios
Hace dos meses desde Asaja se lanzó un mensaje de alerta en el que se aseguraba que «si sigue manteniéndose el ritmo de salidas de los primeros seis meses de la campaña de comercialización de aceite de oliva, hay riesgo de desabastecimiento para finales de año». Sin embargo, su presidente provincial, Ignacio Fernández de Mesa, abogó la semana pasada por la prudencia al afirmar que no preveía problemas para el enlace de campaña, ya que «las cantidades de aceite son suficientes para responder al mercado, sobre todo a nivel nacional».
En una línea muy similar se pronunció el presidente de Cooperativas Agroalimentarias en Córdoba, Rafael Sánchez de Puerta, quien señaló que, «finalmente, serán los precios los que se adecuarán para que se ajusten las salidas con las existencias de aceite».
El otro aspecto que está siendo protagonista en este momento en el mercado del 'oro líquido' es el de las cotizaciones. Según las estadísticas oficiales de la Administración autonómica, el kilo de la variedad virgen extra costaba la semana pasada de media 6,42 euros. Es el valor más alto desde 2007, cuando la Administración autonómica empezó a publicar estos datos. Esta cuantía supone un 86,6 por ciento más que hace un año. Como consecuencia, de ello, el consumo interno de aceite de oliva se ha reducido un 31 por ciento, según un informe del departamento que dirige Luis Planas.
El consumo interno de aceite de oliva se ha reducido un 31 por y la previsión es que los precios se mantengan como hasta ahora o incluso suban
«Claro que es preocupante que baje el consumo, aunque en el caso que nos ocupa, tiene difícil solución debido a que esta situación responde a una menor disponibilidad de producto», según declaró Sánchez. Por su parte, Sánchez de Puerta respondió que esta menor demanda de aceite «no es algo evitable» con la menor cosecha registrada y los altos precios existentes.
En lo que se refiere a cómo pueden evolucionar las cotizaciones en los próximos meses, el también director de Dcoop subrayó que «todo dependerá de las estimaciones de la próxima campaña, puesto que, si se confirman las previsiones que tenemos en este momento y la temporada es mala, los precios se mantendrán en estos niveles o, incluso, seguirán subiendo».
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