La provincia de Córdoba se debate entre la alarma por agua del Norte y los cortes parciales del Sur

Tener agua ya no es sinónimo de poder beberla. Y es lo que ocurre en el Norte donde unas 80.000 personas están sometidas a restricciones. Preguntar por cuánta agua queda es recibir un «depende» como respuesta. En la zona hay dos embalses con agua una vez agotadas las posibilidades de Sierra Boyera hasta que caigan nuevas lluvias. La Colada está a un 55% de capacidad (daría para dos años y medio) pero las aguas no se pueden beber hasta que no se dispongan de determinados elementos tecnológicos que permitan eliminar la contaminación. Emproacsa ha iniciado la redacción de proyectos que va a pagar la Junta con cuatro millones de euros.

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Existe la alternativa del agua de Puente Nuevo, que es lo que todo el mundo quiere, pero la conexión hasta la potabilizadora de Sierra Boyera está pendiente de desarrollo por la CHG. Hasta que eso ocurra, comarcas que tienen agua embalsada seguirán padeciendo restricciones. La solución definitiva es la red secundaria de La Colada que se quedó a medio hacer con el PSOE en la Junta y está por acabar por el PP.

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Ocho municipios del Alto Guadalquivir beben de un solo pantano, el Martín Gonzalo, con una azarosa historia de problemas en la construcción. Actualmente, tiene agua hasta el mes de mayo de 2024 (y eso contando con que no caiga ni una gota), explican en Emproacsa, responsable del servicio en la zona. En el caso de que fuese preciso, se ha habilitado una captación de agua de 8,5 kilómetros de largo para transferir agua del Guadalquivir hasta el embalse.

Nunca fue ese el plan inicial. La zona natural Montoro-Cardeña es una de las que cuenta con una mayor concentración de pantanos de Andalucía. En esta parte de la comunidad, están las presas del Arenoso (que se usa para riego cuando tiene agua: está a un 7,8 por ciento) y del Yeguas. Son ya viejas las demandas de los alcaldes de la zona para la interconexión de pantanos. Primero se exigió el Yeguas-Martín Gonzalo. El Gobierno dijo vale por doce millones. Luego se prometió unir el Arenoso con el Martín Gonzalo. Al final, la captación de agua del trasvase viene del Guadalquivir.

El área Sur de abastecimiento está ligada fundamentalmente al enorme pantano de Iznájar. «Está al 15 por ciento pero eso es mucha agua», explican en Emproacsa. El embalse más grande de Andalucía podría llegar teóricamente a los 920 hectómetros cúbicos y anda por los 140. La zona Sur la componen 33 municipios con un matiz. El manantial de La Hoz da de beber a Iznájar y Rute, mientras que Fuente Alhama lo hace con Luque, Baena, Doña Mencía, Nueva Carteya y Castro del Río.

En Emproacsa reconocen que la sequía ha castigado de forma relevante las reservas de estos manantiales. Según los documentos de la empresa, el subsistema de La Hoz no puede conectarse con el sistema general mientras que el de Fuente Alhama sí puede beber de Iznájar en caso de carestía severa. Las reservas actuales del gran embalse darían para dos años aunque en la zona ya se han tomado medidas como cortes nocturnos con el objetivo de no castigar las reservas de los depósitos locales. Baena ha sido un reciente escenario de problemas de agua al aparecer contaminación en los análisis.