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La Policía «no encuentra nada anómalo» tras visionar las cámaras del local del posible caso de sumisión química

Ni las declaraciones de las denunciantes, ni de los testigos, ni del propio denunciado conducen a un avance de la investiagación, ahora en punto muerto

La Policía investiga un intento de sumisión química con morfina en un bar de copas de Córdoba

Agentes de la Policía Nacional en la comisaría de Córdoba rafael carmona

El grupo de la Policía Nacional en Córdoba encargado de investigar el posible caso de sumisión química de una joven en un local de ocio de la Ribera a principios del mes de febrero ha concluido en su informe que «no ha ... encontrado nada anómalo en el visionado de las cámaras de seguridad del lugar donde se produjeron los hechos». Así lo han constatado fuentes de la investigación a ABC, adelantado por Diario Córdoba.

La investigación policial está en dique seco al agotar todas las vías posibles de análisis desde la declaración de los testigos, a las denunciantes pasando por el denunciado por las jóvenes que pusieron los hechos en conocimiento de la Policía Nacional. Las diligiencias policiales han sido «exhaustivas», según han explicado a ABC estas mismas fuentes, y se ha llevado a cabo de forma minuciosa durante las últimas tres semanas.

De esta forma, hoy por hoy, y a la espera de que se remita este atestado a la Autoridad Judicial podrían encargarse por parte de la Fiscalía o del propio Juzgado instructor nuevas diligencias policiales, mientras tanto no hay ningún detenido por estos hechos. De cualquier modo, tampoco se trata el tema como una «denuncia falsa» de las jóvenes, han detallado fuentes cercanas al caso.

Hay que recordar que la víctima del suceso es una joven natural de Sevilla, que vino a la ciudad a celebrar una despedida de soltera, y que ha denunciado los hechos.

Una de las bases de partida de la investigación de la Policía Nacional era un audio que estuvo circulando por 'whastapp', y en la que una chica, conocida de las que celebraban la despedida de soltera, cuenta qué pasó.

En el audio, la joven indica que dos de las tres chicas que estaban de fiesta fueron al servicio, y cuando volvieron vieron que su amiga -la tercera de ellas- estaba en el sofá medio desmayada, y observaron que un hombre estaba intentando echar unos polvos en las copas. Tras percartarse de ello, las echaron de forma violenta del establecimiento de ocio nocturno en el que se encontraban.

La acusación particular personada en la causa había solicitado que se revisaran las cámaras del local de ocio nocturno en el que habrían ocurrido los hechos.

La joven que se encontraba mal fue al Hospital Reina Sofía, donde le hicieron un análisis de sangre y, de acuerdo al relato del audio, salió que la habían drogado con un componente derivado de la morfina. Un relato que consta en la denuncia ante la Policía. El quién le suministró este potente analgésico, dóndo o cómo no aparece, de momento, en ninguna de las pruebas practicadas por los investigadores.

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