Polémica tras el cese del director del centro de salud de la avenida de América en Córdoba

Para UGT, su destitución tiene que ver con haber firmado el documento de apoyo a los médicos de atención primaria del distrito sanitario Córdoba-Guadalquivir, a los que se les estaría obligando a cubrir guardias en urgencias dependiendo de las necesidades de estos centros «bajo la excusa de la gerencia de que no hay profesionales suficientes para atender las urgencias extrahospitalarias». Por eso piden la dimisión del director del Distrito Sanitario Córdoba-Guadalquivir.

Según señaló la secretaria de Sanidad y Servicios Sociosanitarios de UGT, María del Carmen Heredia, «esta acción por parte de Salud sobre un trabajador, aplicando una sanción disciplinaria por verter su opinión con una firma sobre una situación de abuso, no sólo supone una demostración de caciquismo institucional, sino que supone un atentado al estado de derechos y libertades que sostiene una sociedad democrática y de derecho, un atentado contra la libertad de expresión y la libertad sindical».

Para Comisiones, era «el único director de un centro de salud que ha defendido a su plantilla» y ejercía su labor desde hace varios años. El delegado de CCOO en el Distrito Sanitario Córdoba, José Antonio Prados, insistió en que la destitución «es una muestra más de la actitud despótica del equipo directivo del Distrito Córdoba-Guadalquivir». En las últimas semanas, «se han tomado decisiones de forma unilateral que empeoran las condiciones de trabajo» de los profesionales de este Distrito.

Así, «se ha impuesto a los equipos de admisión de los centros de salud la realización de sábados en centros de urgencias sin remuneración adicional. Y desde hace dos días, de forma también impositiva, se está obligando a médicos de familia, que ya están sobresaturados con consultas de hasta 50 y 60 pacientes, a realizar guardias en tardes, noches y fines de semana».

Estas medidas y actitudes, como ya avisó CCOO, están provocando que muchos médicos se planteen dejar los centros de salud. De hecho, «ya hay seis médicos de familia que han presentado el cese o lo harán en los próximos días, agravando el importante déficit de profesionales», advirtió José Antonio Prados, quien recordó que «el distrito no ha sido capaz de fidelizar a los que se han formado en él».

La responsable de UGT recordó que situaciones del mismo corte se habrían producido recientemente en otros centros de salud de la provincia e instó a la dimisión de la gerencia del distrito Córdoba-Guadalquivir «por su ineptitud a la hora de afrontar los servicios y su actitud impositiva que resta derechos y oprime a sus médicos, que ya se encuentran desbordados en su quehacer en la atención a las familias».

Denunció además que «la decisión de hacer trabajar a los médicos, de forma obligatoria, en otros servicios que no son los que tienen asignados, realizando turnos extra, supone un atentado contra la conciliación familiar de estos y estas profesionales, que han sufrido como pocos las consecuencias de la pandemia y ahora trabajan bajo el esfuerzo de hacer el trabajo de todos los médicos que la Junta de Andalucía no contrata y que son necesarios para atender la salud de los cordobeses».