Religión

Pérez Moya, cuando el Cabildo Catedral de Córdoba multiplicó la actividad cultural y la transparencia

La presencia social de la institución capitular ha crecido en los últimos años en conferencias, congresos y actos públicos

Joaquín Alberto Nieva, nuevo presidente del Cabildo Catedral de Córdoba

El Cabildo Catedral de Córdoba prepara la elección de un nuevo presidente tras los 16 años de Pérez Moya

Manuel Pérez Moya, durante un acto público Valerio Merino

¿Quién compone en el Cabildo Catedral de Córdoba? ¿Conoce usted a algún canónigo? Podría haber sido una forma de comenzar una encuesta sobre la visibilidad y conocimiento que la sociedad en general, y los fieles cristianos en particular, tienen de los organismos de ... la Iglesia.

El Cabildo Catedral es una de las instituciones más antiguas de la ciudad, porque data del siglo XIII y a ella han pertenecido sacerdotes conocidos en toda la sociedad cordobesa. Pero ha sido sobre todo en los últimos 16 años, en la etapa de Manuel Pérez Moya como presidente, cuando su presencia en los medios de comunicación y en la sociedad ha tenido que crecer.

Ha sido en parte a su pesar, para responder a quienes cuestionaban la propiedad de la Mezquita-Catedral, pero también por la voluntad de funcionar como un motor para la cultura, la investigación y la difusión del conocimiento.

Manuel Pérez Moya, nacido en Hornachuelos el 1 de mayo de 1948, llegó a la Presidencia del Cabildo Catedral en 2006 para sustituir a Juan Moreno. La Mezquita-Catedral siempre es noticia, sobre todo para visitas y restauraciones constantes, pero en aquel momento se multiplicó su presencia sobre todo por motivos.

Por un lado, el número de hermandades que hacían estación de penitencia en la Catedral no dejaba de crecer y la necesidad de llevar allí la carrera oficial se convirtió en un clamor que el Cabildo atendió.

Primero, con las facilidades crecientes para entrar y para permanecer y, más tarde, también con la solicitud de la retirada de una de las celosías que daban al Patio de los Naranjos para que el templo pudiese tener una segunda puerta practicable.

Todo eso se fue consiguiendo hasta que desde 2017 la carrera oficial discurre por un nuevo camino que rodea la Mezquita-Catedral y pasa por su interior y por cuatro de sus puertas.

De forma simultánea a este proceso también tuvo que hacer frente a una fuerte campaña que pretendía hacer calar en la opinión pública la idea de que la Mezquita-Catedral era un monumento público que sólo pertenecía a la Iglesia desde que se inmatriculó en el año 2006, y que por lo tanto su propiedad era ilegítima.

Una plataforma con origen y financiación poco claros realizó numerosas actividades, entre ellas una canción, aunque el recorrido judicial del asunto no pudo ser más corto: los tribunales reconocían a la Iglesia como único propietario desde la Reconquista en 1236.

Argumentos

El Cabildo tuvo que alzar la voz para difundir sus argumentos históricos y también recordar que su labor como custodio del monumento se concreta en la reparación continua de cubiertas e instalaciones y también en la restauración artística de muchos elementos. No sólo la cúpula del crucero y el coro, realizadas por el Ministerio de Cultura a partir de 2006, sino también decenas de capillas y de las portadas exteriores lucen en los últimos años en todo su esplendor.

Con Manuel Pérez Moya como presidente se ha multiplicado la actividad cultural, casi siempre a través de una nueva institución: el Foro Osio, que ha organizado muchos encuentros y congresos para hablar de distintos temas. Algunos tienen que ver con el estudio y difusión de la Mezquita-Catedral, como el encuentro en que se habló de las investigaciones en la cúpula de la maqsura, y que tuvo entre sus asistentes al arquitecto Rafael Moneo. También se han dedicado dos congresos al estudio de los mozárabes y a San Juan de Ávila.

En esta época, el Cabildo Catedral se ha alzado además como una de las instituciones pioneras de la transparencia a la hora de publicar sus cuentas y su economía.

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