La oferta municipal para intentar despertar el interés por el Alcázar

El alcalde de Córdoba, José María Bellido, explicó este viernes en la presentación de 'Naturaleza Encendida: Raínces', que la nueva propuesta se enmarca por una decisión municipal. Y es que el Alcázar tenga una presencia mucho mayor de la que ahora tiene en la gestión monumental de la ciudad. Eso se está haciendo mediante inversiones concretas que suman, explicó el regidor, 1,8 millones de euros.

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Una parte de esas reformas del Alcázar estaban realizadas a falta de que se pusieran en marcha como la creación de un nuevo sistema de taquillas, el cambio en los recorridos interiores o la habilitación del acceso de la puerta barroca en la que han aparecido los restos de la construcción original.

A ello se suman proyectos de largo alcance como la integración del patio de las mujeres, que tiene una colección relevante de restos arqueológicos, o la creación de las condiciones precisas para que personas con sillas de ruedas o problemas generales de movilidad puedan caminar por un recinto que no se pensó para estas circunstancias vitales. En el futuro, se restaurará la torre de la Inquisición en su totalidad y se quiere trabajar en la mejora del camino de ronda, el paseo por las murallas.

Por último, el Ayuntamiento trabaja en la cualificación urbanística del espacio de la Ribera que linda con los jardines del Alcázar y por donde se iniciará la visita en un futuro no concretado. La zona era un no parar de autobuses de turistas aunque el tráfico privado era ya claramente inexistente desde que se colocó la cámara anexa.

Tras varias ideas al respecto, el Consistorio ha optado por llevar ese parada a la avenida de Fray Albino de forma que se reduzca el paso de vehículos de gran tamaño por la Ribera, el Campo Santo de los Mártires y parte del barrio de Vallellano. Un viejo proyecto municipal quiere restituir los jardines del Alcázar hasta el momento anterior en que se trazó la carretera nacional. Originalmente, llegaban hasta el mismo cauce del río como puede comprobarse por las torres albarranas que aún jalonan parte de la Ribera.

Orgánicamente, la gestión del Alcázar siempre ha sido bastante compleja. Depende formalmente de la Dirección General de Museos de la Concejalía de Cultura, como el Romero de Torres. Pero es un centro de mucho mayor uso e interés como puede verse en las colas que se forman en los días punta. En varias ocasiones, los informes municipales han pedido que se le dote de una autoridad única, un director o directora, que coordine todas las actividades públicas y privadas.