María José Carralero, decana del Colegio de Procuradores de Córdoba: «Hay un abuso de la Ley de Violencia sobre la Mujer y se debería revisar»

«Probé y aquí sigo, aunque nunca pensé en ser decana, y he repetido el segundo mandato», admite. Esta procuradora con don de gentes y profesionalidad representa a la cara amable pero firme de la Procura al responder sin cortapisas a ABC haciendo una firme crítica al mal uso de la Ley de Violencia de sobre la Mujer, porque sabe lo que hay detrás de cada denuncia. Sólo en lo que va de año llevan notificadas más de 900 demandas en juzgados de Familia desde modificaciones de medidas, divorcios, separaciones o ejecuciones.

—¿Cuáles son los asuntos que más le preocupan en su día a día en Justicia?

—Me implico mucho en los temas de Familia porque te llevas las preocupaciones a casa. Haces muchas veces de psicólogo. Ahora vuelvo de un juicio por divorcio y hay una chica que dejó el trabajo por quedarse con su marido; lo apoyó para que él siguiera adelante y luego cuando te divorcias te dicen que has dejado de trabajar porque has querido. No mereció la pena haber dejado el trabajo, me ha dicho. De esos casos de familia veo muchos. La mayoría de los padres en los juicios de familia llegan porque se desentienden de sus hijos, hay que estar detrás de ellos. Eso duele porque al fin y al cabo son sus hijos. Hay ejecuciones, no pagan pensión de alimentos y más aún si hay otra pareja y otro hijo eso ya es el olvido de los primeros. También hay muchos padres que están volcados y nunca se desentienden, pero los casos que llegan son los primeros.

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—¿Detectáis que hay vez más custodias compartidas?

—Hay cada vez más custodias compartidas, suelen darse si son de mutuo acuerdo y quedan bien resueltas pero si son contenciosas al final surgen los roces y el juez termina dando la custodia a uno u otro. A partir de los 12 años a los niños los exploran, es decir, le escuchan en sala para preguntarle qué es lo que quieren. Acuden a sala solos, sin sus padres, y responden al juez y al fiscal. Los niños se suelen abrir, y pese a lo que se pueda pensar, la mayoría dice que quiere estar con los dos.

—¿Cree que la mediación es una buena fórmula para evitar una mayor litigiosidad?

—A ver, la mediación está de moda, es lo que se quiere implantar, pero antes de poner una demanda de divorcio o de modificación de medidas tú has hablado con la otra parte, si no llegan a un acuerdo en ese momento difícilmente van a llegar a una mediación. Normalmente, los acuerdos se hacen poco antes de entrar a sala y se suelen ser un poco forzados porque empieza a presionar el juez para llegar al acuerdo, y al final alguien sale perjudicado. Siempre depende del caso.

—Ese aumento de la litigiosidad en los órganos judiciales se deja notar sobre todo en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer, ahora el TSJA ha aprobado la creación de un segundo juzgado...¿Qué ocurre?

—En Violencia de Género hay mucha denuncia. El TSJA ha dicho que hace falta un segundo juzgado completo. Le pongo un ejemplo: tengo unas medidas provisionales como para ver a unos hijos de una madre supuesta víctima de Violencia sobre la mujer señaladas para finales de año, esto al padre, sin sentencia le supone un año sin ver a su hijo y pierde el contacto total. Nosotros pedimos que se señale antes que se celebre en cualquier hueco de una suspensión. Ves a ese padre, porque normalmente es el padre el que no ve al hijo, y le crea una impotencia y cierta sensación de injusticia.

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—¿Habéis detectado en casos de Familia y Violencia sobre la Mujer que hay denuncias falsas?

—Si, las hay. Cuando hay tres denuncias contra un hombre y las archivan de forma sucesiva ya sabes que es que no hay nada. Se aprovechan de la la Ley de Violencia de Género en este tipo de casos, yo creo que habría que modificarla, pero a ver cómo se hace ahora a cuando está la mujer en todo lo alto, empoderada y su palabra vale más que la del hombre. Yo se lo digo a mi hijo, estás vendido. Tampoco hay acciones que eviten estos casos porque no se investigan las causas por denuncia falsa. El juez archiva el caso y no se debería sin más, habría que iniciar acciones por denuncia falsa si se considera que así ha sido.

—¿Considera que esta ley de Violencia sobre la Mujer es injusta?

—Es triste ... tanta igualdad, tanta igualdad, y se ha inclinado tanto la balanza hacia un lado que la igualdad no existe. Yo creo que estamos retrocediendo. Se está abusando mucho del mal uso de la Ley, ahora no hay igualdad es una gran desigualdad, yo creo que antes éramos más iguales que ahora. Yo lo siento así, me van a decir de todo, pero es así. Yo a los padres los veo desprotegidos. ¿Dónde está el límite? ¿por qué yo no tengo derechos y ella sí? En Familia es diferente pero en Violencia todos los derechos para la mujer y ninguno para él.

—¿Por qué ocurre eso? ¿Quién está detrás de esas denuncias?

—Yo diría que el Instituto de la Mujer aprieta mucho por ahí. Una mujer acude a este servicio diciendo que le insultó y formulan la denuncia. Luego la mujer se lamenta que ha dormido en el calabozo; muchas denuncias no se quieren poner pero si se ponen. Así se satura el Juzgado de Violencia, porque va todo y luego al final se van juntos a casa. Se judicializa todo y no debería ser así. Yo estoy convencida de que de un total de diez condenas por violencia tres sólo son las verdaderamente maltratadas, el resto yo pienso que no. Porque te digan 'cabrona' o 'hijaputa' es un insulto no un maltrato, igual que ella le puede decir eso durante una discusión a él y no es delito. En ocasiones se podría hacer este tipo de denuncias ante el juzgado por razones económicas. Se debería de modificar la Ley en el sentido de que en cualquier momento se pudiera revisar si han cambiado las circunstancias porque hay mujeres calificadas de maltratadas que tienen su paga por ese motivo y conviven con su agresor.

—¿Es una profesión a extinguir después de las notificaciones por vía Lexnet?

—Yo creo que al revés que hay muchas más jurisdicciones como la Laboral en la que no es preceptivo que esté el procurador y sin embargo cada vez hay más procuradores. Es una profesión desconocida pero necesaria, solventamos todos los errores que puede traer un expediente -están incompletos o contienen algún error-. Ahora son muchos los compañeros que se jubilan y este año sólo ha entrado una nueva colegiada. Somos mayoría de mujeres, sobre el 70 por ciento.

—¿En qué orden jurisdiccional encontráis más retrasos?

—En lo Social y lo Civil. Hay juzgados que están señalando con un año de retraso, otros no. Con la implantación del nuevo sistema @Adriano el reparto de asuntos va lento, va cayendo a cuenta gotas, van repartiendo por el 7 de mayo, mínimo es un mes de retraso. Cuando las reparten hay determinados LAJ que no aceptan las demandas en el momento y se pierden. Hemos pedido a través del Consejo Andaluz de la Procura que la Junta nos abra un canal directo con la Administración para las incidencias.