La Graílla
Atribuido al cambio climático
Igual que una obra de un período y una escuela se adjudicaba al maestro principal, el viento furioso de Bernard tiene el mismo responsable que el calor
Lectores de ocasión
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Iniciar sesiónLas ramas tronchadas por la fuerza de una plaga bíblica, los troncos arrancados de la tierra en que antes se anclaban como trasatlánticos en barbecho. Los rasgos no dejan espacio para las dudas: lo que pasó en Córdoba en la noche atroz del 22 ... de octubre, cuando la ciudad se recogía del domingo y miraba estremecida por la ventana desde la que el viento soplaba como un dios antiguo y furioso, es un cambio climático auténtico.
El que quiera que se lo certifiquen tendrá en las aulas grandes y pequeñas a gente dispuesta a firmarle que la borrasca Bernard, con sus rachas de 128 kilómetros por hora y la lluvia en otoño, es uno de esos fenómenos extremos propios del calentamiento global creado por la acción de quienes se empeñan en viajar en avión, encender el aire acondicionado y coger el coche.
Con el cambio climático pasa lo mismo que con los grandes genios en la época en que la Historia del Arte todavía no había despegado del todo: cualquier gran obra de un período y de una escuela se atribuía sin miramiento al maestro principal. Un Crucificado expresivo y poderoso del siglo XVII sevillano no podía ser más que de Montañés, y a los ojos de muchos así ganaba incluso valor antes de que alguien descubriese el nombre de Juan de Mesa y reconstruyese los rasgos de una personalidad del todo distinta.
Ahí al menos se buscaba el prestigio, que es hasta disculpable, pero cuando el arte empezó a pisar el mercado con muchos ceros había quienes se movían por los márgenes y atribuían con el fijo criterio de los rasgos epidérmicos. ¿Esta pintura oscura que parece presagiar un cierto expresionismo? No hay duda de que es de Goya. ¿Santa Ana enseñando a leer a la Virgen María con vestiduras del Siglo de Oro pero dispuestas de cualquier manera? Velázquez, si está claro. ¿Una pintura aseadita y luminosa, de aire italiano? Es un estudio del mismísimo Rafael Sanzio.
Con el cambio climático es un solo autor para todo, del tenebrismo barroco hasta el expresionismo alemán. Si hay muchos días a 40 grados es cambio climático, si el veranillo de San Miguel se remolonea hasta el Pilar es cambio climático, si hay una noche otoñal de viento desusado es cambio climático y será cambio climático si vienen lluvias que desbordan los embalses y frenan la sequía que también ha creado el cambio climático.
No será por atribuciones ni expertos, pero todos tendrían que escuchar lo que pasó en la época en la que el mercado estaba lleno de obras falsas, algunas hasta el esperpento, de Julio Romero de Torres. El prestigio del pintor estaba por los suelos y sólo empezó a recuperarse, y a partir de ahí el precio de sus obras buenas, cuando Mercedes Valverde acreditó las auténticas y desterró de las subastas los pastiches que el pintor ni habría soñado. Si todo es cambio climático nadie podrá callar al que diga que es el calor el que debilitó la piedra y provocó que cayera el San Rafael del Alpargate.
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