León XIV, un papa muy cercano a las monjas carmelitas de Aguilar de la Frontera

Noticia Relacionada

El párroco cordobés que convivió con el nuevo Papa León XIV en Perú: «Era como un padre, preocupándose por todo; un buen pastor»

J. Pino

Miguel Jiménez, sacerdote en Carcabuey, describe su contacto con monseñor Robert Prevost en la diócesis de Callao, de donde era administrador

En Chiclayo hay 18 hermanas en la congregación que han contado en su convento con la presencia de León XIV en distintas ocasiones. Tanto en visitas pastorales como cuando lo han llamado siendo obispo para que predicara la eucaristía. De hecho la comunidad religiosa de los agustinos, a la que perteneció el santo padre, se encuentra a tan solo ocho kilómetros del convento carmelita. Y los agustinos han sido mucho tiempo los capellanes de las carmelitas.

Las monjas de Aguilar conocen por referencia de sus hermanas en Perú que ha sido un obispo «cercano, bueno y de buena doctrina que tiene a Cristo en su centro». Fue precisamente el papa quien, siendo obispo, dio el visto bueno para que la madre Maravillas y la madre Teresa Margarita se trasladaran desde Chiclayo al convento aguilarense. Y es que tanto allí como aquí dependen de manera directa del obispado a quien deben obediencia y quien tiene que autorizar cualquier movimiento.

Además la madre Ángeles explicó a ABC que más de una vez, desempeñando su cargo de obispo, ha preguntado por las hermanas que se vinieron a España. Tienen la seguridad de que va a ser un papa cercano a todos y cercano a los pobres. También estará cerca de las congregaciones religiosas porque se ha formado en el seno de una de ellas. Entre sus señas de identidad destacan su sencillez. Cuando lo nombraron obispo dijo a las carmelitas que nunca pensaba que lo iban a nombrar para este cargo. Y cuando fue designado cardenal les manifestó que le iba a costar salir de Chiclayo.

Ante la pregunta de una hipotética visita del papa a España pasando por el convento de carmelitas de Aguilar para visitar a las monjas de Chiclayo la madre Ángeles contesta con alegría que si el Señor dispusiera ese momento sería recibido con un gran entusiasmo. Pero añadió que ahora lo importante es rezar mucho por él para que tenga fuerza y lleve la luz de la evangelización al mundo.