La Junta espera iniciar en enero una nueva tanda de instalación de asccensores en Santuario de Córdoba

La acción más esperada por los vecinos, y también la más costosa del ARRU, es la instalación de ascensores en unos edificios que se construyeron sin ellos hace más de medio siglo. Muchas de las viviendas ya disponen de elevador, gracias a las sucesivas intervenciones similares que la Junta lleva realizando desde hace dos décadas. Sin embargo, aún queda trabajo por hacer en Santuario.

Hasta la fecha se han recibido 88 solicitudes de ayudas públicas para el ARRU correspondientes a otros tantos bloques, de las que 67 cumplían los requisitos y están siendo evaluadas por los técnicos de Fomento. La consejera del ramo ha asegurado que una vez terminados los trámites burocráticos previos, las obras podrían comenzar en el próximo mes de enero. Despuñés, hay un plazo de dos años para terminarlas todas, por lo que para finales del 2024 todos los edificios del barrio podrían disponer de u n ascensor.

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Esta intervención tiene un presupuesto de 4 millones de euros, de los que el Ayuntamiento de Córdoba aporta uno, en un ejemplo de colaboración entre administraciones. La mayor parte de esa cantidad (aunque los técnicos no han precisado cuánto exactamente) va destinada a colocar los montacargas, pero también está previsto retirar las placas de fibrocemento (un material cancerígeno que ya no se usa en la construcción) que cubren los tejados, así como adaptar los recibidores para facilitar la movilidad mediante rampas.

Tampoco se sabe qué porcentaje del coste de instalación de un ascensor tendrán que poner los vecinos. «Es muy poquito», ha dicho la consejera. La subvención final depende de los niveles de renta de los vecinos de cada bloque, por lo que la casuística es muy variada. En algunos casos de comunidades que ya tienen el elevador o lo están instalando, cada propietario ha tenido que abonar cantidades que van entre 3.000 y 4.000 euros.

Además, la consejera ha informado también de las actuaciones previas en el barrio de Santuario, concetradas en la instalación de ascensores (más de un centenar, según sus propias palabras), que han supuesto una inversión de nueve millones de euros con fondos en su mayor parte procedentes de la Unión Europea.