Pedimos información

Si alguien dice que se han bajado o que no han subido los impuestos, pero los ingresos presupuestados se han visto incrementados, hay que desconfiar. Eso sólo es posible si hay más contribuyentes a aportar, que permitan al conjunto recaudar más tributando menos. También se pueden incrementar los ingresos bajando o sin subir impuestos, si se genera deuda con las entidades financieras. En este caso no es bajar impuestos sino diferirlos en el tiempo, es decir, lo que hoy no pagas, lo pagarás mañana con intereses. ¡Sigamos!

Una parte fundamental del presupuesto lo conforman los gastos. De esos se habla menos porque entre ellos están, ocupando un lugar nada despreciable, los improductivos. Gastos que, hablado en 'román paladino', pagan los ciudadanos, pero se destinan a asuntos que para nada interesan ni sirven a quienes soportan la factura. Hablamos de la corrupción, de la insostenible y elefantica máquina burocrática, chiringuitos inútiles, aumento de personal a cargo del erario sin una justificación o rentabilidad clara, etc. etc. Sin presupuesto nunca nos enteraremos.

Hablemos de nuestra realidad. Los políticos locales nos dicen que bajan los impuestos. Créame el lector que no voy a contradecirles. Pero nos informan que en el presupuesto municipal para 2025 los ingresos se han visto incrementados respecto del ejercicio anterior en un 8,2%. En el caso de la Diputación Provincial el incremento es del 10,84%. Es de justicia pedir que el gobierno o la oposición nos digan, a mí el primero y con palabras entendibles por el vulgo, ¿cómo se ha conseguido aumentar los ingresos bajando impuestos?

Para ejercer sensatamente nuestra soberanía, necesitamos estar bien informados.