La borrasca Jana ha llevado a que Sierra Boyera desembalsara en estos días. Lo hizo, ha informado Emproacsa, después de que alcanzara «el 94,87% de su capacidad, un hito que no se registraba desde 1996 (87,6%)».
Ante esta situación excepcional, se explica desde la empresa provincial de aguas, se procedió «a un desembalse controlado para optimizar la regulación del agua».
En la jornada del jueves, este pantano, que abastece a la zona Norte de la provincia, se seguía mostrando unas excelentes reservas de líquido elemento: contaba con 37,25 hectómetros cúbicos, según los datos que ofrece la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG). Su capacidad es de 39,47, con lo que está lleno al 94,37%.
La situación contrasta absolutamente con la que se daba en el verano de 2023. A fecha de uno de agosto del citado ejercicio, por ejemplo, Sierra Boyera tenía entre sus paredes únicamente 0,24 hectómetros cúbicos. Es decir, estaba al 0,09% de su capacidad; o sea, se había secado.
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