La Fundación Magtel de Córdoba reconoce a ocho proyectos de mejora social en todo el mundo

En la categoría de Inserción Socio-Laboral, el premio ha sido para la Asociación Red XXI, una entidad que trabaja con jóvenes en situación de exclusión social, en concreto en el barrio cordobés de Las Palmeras. Se les proporciona formación para que puedan conseguir un trabajo y mejorar su vida.

Como en todas las categorías, hay un accésit, que ha sido para la Fundación Valentín de Madariaga por el proyecto 'Distra', que prepara a personas con discapacidad intelectual para formarse e integrarse en el mundo del trabajo.

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Fotos: La entrega de los premios de la Fundación Magtel en Córdoba

Valerio Merino

La institución reconoce la labor de ocho entidades por la inclusión, la cooperación, la innovación y el medio ambiente

En Innovación Tecnológica se distingue a los proyectos que busquen potenciar las energías renovables, las telecomunicaciones y todo aquello que vaya en beneficio del medio ambiente. El premio, diseñado por el arquitecto cordobés Juan Cuenca, se ha entregado a Bioliza.

Su proyecto es transformar una orujera en una biofábrica para crear, con residuos de almazara, biomasa que sirva para generar energía con un material que de otra forma habría terminado desechado.

El accésit se ha entregado a la firma Andaltec I+D+i por haber lanzado un proyecto de climatización con materiales plásticos y enfriamiento evaporativo, de forma que resulta mucho más sostenible y eficiente en lo energético.

En el apartado de Cooperación Internacional el premio se entrego a la Fundación Entre Culturas Fe y Alegría, de la Compañía de Jesús, por su trabajo en la inclusión de 14.000 estudiantes, 1.500 de ellos con algún tipo de discapacidad, en Bolivia, Ecuador y Perú. Se realiza, como explicó la fundación, desde un «enfoque de derechos».

El accésit lo recibió la asociación World Geologists, una asociación que agrupa a geólogos que quieren mejorar el mundo con proyectos en distintos lugares. El que ha distinguido la Fundación Magtel es para llevar agua potable a una región de Senegal.

Los de Innovación Social tienen que ver con la extensión de las nuevas tecnologías a toda la sociedad para conseguir mejor calidad de vida. El premio se entregó a la Fundación, por su trabajo para «reducir la brecha digital» que se da en los grupos vulnerables, los que menos contacto tienen con la tecnología o menos acceso.

El accésit se entregó al proyecto Alfabetics 60, que se dirige a que personas mayores de 60 años, no tan familiarizadas con las nuevas tecnologías, estén capacitadas para trabajar con los ordenadores y teléfonos móviles, y eso a través de los proyectos de inclusión digital.