Toros
Ferrera, Morante y Garrido se reparten ocho orejas en Priego de Córdoba
La terna participó en un festejo donde se conmemoró el 130 aniversario del histórico Coso de las Canteras
Finito ultima su mano a mano con José Mercé en la plaza de toros de Lucena
Víctor Molino
Priego de Córdoba
Popurrí de torero en tarde conmemorativa. La histórica plaza de Priego de Córdoba, el Coso de las Canteras, celebró ayer una corrida de toros con una terna de estilos enfrentados donde hubo más jugo en el segundo tramo sin un deleite pleno. Entregados ... los toreros, con voluntad ante un público amable y con unas reses de acompañamiento se disfrutó de una actividad caracterizada por el empeño de Ferrera, la capacidad artística de Morante y el empaque de un Garrido que vuelve a reivindicar su sitio.
La faena cóctel de Ferrera ante el cuarto fue premiada con dos orejas. Íntimo, expuesto, muy en su estilo, se atrevió con todo en una composición donde acabó por sumar tres apéndices gracias al tesón y empuje demostrados. Exprimió con recursos su particular concepto para así recalcar que pudo en todos los tercios. Faena con un poco de todo ante el que desorejó. Firme en la composición de capa, colocó el primer puyazo desde la grupa y banderilleó con ahínco. Ante un animal vivaz, comenzó con la tela de rodillas, junto a las tablas, para torear con descaro. Con el fondo acústico del pasodoble 'Manolete', dejó una secuencia creativa en las series que se consumó en una faena variopinta que caló en la grada.
El extremeño recibió en el tercio con una larga de rodillas a su primero. Su particular capote oliva guió hasta los medios, destacando en el remate. La res, con la cabeza siempre arriba y corta por el izquierdo, no acabó de entregarse ante un dispuesto lidiador que fundamentó su obra sobre la diestra tras brindar al respetable. En el tramo final pudo reprimir su empeño con una completa serie por bajo y al natural. Faena de convencimiento más que de virtud. Ferrera fue prendido sin consecuencias tras entrar a matar por segunda vez y antes de tocar pelo.
Morante formó un lío de muleta al quinto después de haber dejado cuatro verónicas antológicas compuestas con fondo ralentizado, armónicas y elegantes. Con ese regusto inicial, el sevillano arrancó con temple para sacar a los medios trazando con largura y profundidad. Con su exquisita cadencia, supo acariciar la muleta para dibujar derechazos cosidos con relax. Pero fue al natural cuando el toreo se elevó al nivel de los dioses, donde la inspiración impuesta consiguió dar la vuelta al concepto previo de la faena de su antecesor. Ensimismado, hurgó en la trastienda de su sentimiento firmando un pasaje para el recuerdo, dulce y de aroma inigualable.
El segundo
Ante el segundo, compuso a la verónica con estilo, conduciendo al centro antes de rematar con una coqueta media. La res, que metía algo más la cara, salía suelta. Después de ofrecer a la parroquia, enjaretó para tirar hacia fuera con maestría y sobre la derecha, donde hubo más fondo. No se entregaba el enemigo y el torero, con inspiración, recogía con la diestra figurando en los detalles entre la media y corta distancia. El cierre, con ayudados por alto repuntó los chispazos de creación. Faena concluida solo a tramos que no tuvo premio.
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Garrido recibió a pies juntos y hacia fuera, rematando con dos medias a su primero. Bien con el capote y docto en los quites barruntó una completa tarde donde reivindicó paso. Torero para volver a tener en cuenta. Brindó al público el tercero antes de arrancar pegado a tablas y en el estribo. Faena limpia, de buen planteamiento, con estilo y empaque ante un animal rajado y algo huidizo. Insistente el torero para concluir.
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Con franqueza anduvo ante el que cerró plaza, reponiendo con con la diestra y dejando una faena de aficionado cargada de empaque. Vibrante estuvo a la verónica y, de nuevo, con la capa en el quite, plantando con sinceridad los engaños. Con criterio y pureza, se mostró firme, con entendimiento y fijando los terrenos. Ligó las series antes de poner fin con manoletinas y estoquear con precisión.
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