Jesús León agota otro día más sin pagar las deudas para desbloquear las inscripciones del Córdoba CF

El incumplimiento continuo de los plazos anunciados por el club para pagar las deudas pendientes e inscribir a los miembros del plantel cordobesista, el embargo a los ingresos de la entidad blanquiverde y el impago del último plazo de la compraventa -cuestiones provocadas por la gestión directa o indirecta de Jesús León al frente de la SAD- han conducido a una temible situación económica e institucional que ha llenado de incertidumbre el presente y el futuro del club y tiene en vilo al cordobesismo sobre la posibilidad de si el equipo competirá o no en Segunda B desde el domingo.

No hay tiempo para más regates, más palabras ni más gestos propagandísticos. Es la hora de la realidad. El Córdoba tiene que cumplir con sus obligaciones económicas para jugar el domingo a partir de las 21.30 horas en El Arcángel ante el Recreativo Granada. El viernes expira el plazo para conseguir que haya fútbol. Antes, el Córdoba, con León a la cabeza, o un tercero en su nombre tienen que pagar (o conseguir que se retiren las denuncias sin hacerlo) unos 200.000 euros.

Son varios los acreedores que bloquean los derechos de inscripción de jugadores y técnicos para esta temporada. De un lado, las deudas contraídas con los exentrenadores José Ramón Sandoval y Curro Torres; de otro, la empresa Viasport por el traspaso de Sebas Moyano a un fondo de inversión; y, por último, las cantidades pendientes con jugadores del filial blanquiverde y el equipo femenino de la última temporada. Ha pasado un día más y nada ha cambiado. Las cantidades pendientes siguen sin abonarse y el club sin poder inscribir a sus jugadores.

Con la credibilidad bajo mínimos, León no tiene más remedio que apuros los plazos para conseguir la liquidez que le permita abonar las deudas a los acreedores y desbloquear la inscripción de los jugadores para disputar la primera jornada. Ya solo caben los hechos . No hay tiempo para más palabras. O paga hasta el viernes y compite o no lo hace y el Córdoba quedará durante una semana en un limbo deportivo e institucional.

En cualquier caso, Carlos González , que batalla por el control del club después del impago del último plazo de la compraventa el 31 de julio, señaló el sábado en declaraciones a ABC que Azaveco (su empresa) «se hará cargo de esas deudas el viernes si Jesús León no lo hace» para que los jugadores puedan inscribirse y el equipo competir en Segunda B.