El riguroso penalti que volvió a cruzarse en el camino del Córdoba CF en Zaragoza

En sala de prensa, Iván Ania fue preguntado por la actuación arbitral y comentó que «tendría que ponerme a analizar varias jugadas del partido Creo que la amarilla de Álex Sala no es amarilla y el penalti es riguroso. No suelo hablar de los árbitros y tampoco lo lo voy a hacer hoy. No sé si habrá tenido influencia en el resultado. Está claro que la sensación que transmite el equipo es buena, que tiene una sensación de dominio en el juego, pero hay veces que los detalles nos están penalizando».

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Para él, «creo que es un penalti innecesario el que nos pitan porque era un balón que ya nos había sobrepasado y y lo habían echado fuera, esos detalles son importantes. Igual que en la primera parte, a raíz de hacer una falta innecesaria, nos sacan dos córners y se meten en el partido. Son esos mini partidos de los que siempre hablo, hay momentos en los que tenemos que manejarlos de mejor manera».

El Córdoba lidera la clasificación en lo que a penaltis recibidos se refiere. Con el de Zaragoza, ya son once las penas máximas por las que ha pasado el cuadro que dirige Iván Ania. Seguido del Cádiz y el Castellón con 10 penaltis en su contra. Un promedio de 0,31 penaltis en contra por partido. Es decir, un penalti cada cuatro encuentros aproximadamente.

No es la primera vez durante la temporada que el Córdoba es protagonista, sin quererlo, de jugadas polémicas que han decantado el encuentro. El equipo de Iván Ania es uno de los más amonestados de la categoría y el que más penas máximas ha visto en su contra. En Cádiz allá por noviembre, el propio CEO del club, Antonio Fernández Monterrubio, mostró su malestar por el arbitraje sufrido. Un compañero de viaje del Córdoba durante su nueva etapa en el fútbol profesional.

En la memoria de la afición blanquiverde está el agarrón que Obolskii sufrió en Huesca y que ha recordado al de Albarrán en Zaragoza. Sin embargo, uno no fue señalado y otro sí, el del empate en La Romareda.