El Constitucional salva el artículo de la Lista que permitirá la operación de Cunext en Córdoba

El tribunal ha decidido eliminar, por inconstitucional, un pequeño inciso de ese artículo, que permitía la creación de usos residenciales vinculados a proyectos de equipamientos, industriales, terciarios o turístico siempre que exista vinculación entre la casa y el equipamiento o la casa y la fábrica. Es decir, la sentencia se ha llevado por delante la vivienda del guarda pero ha dejado la industria, el complejo hotelero o el centro de menores. La sentencia le da la razón a los recurrentes (Unidas Podemos- En Común Podem-Galicia en Común más los grupos Republicano (ERC), Plural y Mixto) en que la casa vulnera las exigencias ambientales del suelo rústico y no así, por ejemplo, una fábrica de metalurgia.

La sentencia debería ser acogida en el Ayuntamiento de Córdoba y en la economía cordobesa, en general, con un enorme suspiro de alivio. Básicamente, la norma se queda como está con dos anulaciones (el inciso de las viviendas y que las instalaciones mineras no necesiten licencia municipal) que no son asuntos nucleares dentro de la gestión urbanística. El problema del recurso es que sí ponía en tela de juicio dos artículos concretos que son claves para la operación Cunext y cuya inconstitucionalidad hubiera supuesto un problema.

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Los partidos recurrentes se estaban intentando partes relevantes de los artículos 21 y 22 de la norma. Es decir, los que arbitran la creación de grandes proyectos industriales en suelo rústico. El comunicado remitido entiende que en ambos casos ni se produce una vulneración de la autonomía local, ni hay ningún elemento destacable que contravenga la legislación ambiental y las exigencias para que el suelo rústico siga siendo rústico.

La Lista habilita un sistema, que es el que estaba recurrido, para crear grandes proyectos económicos y energéticos en suelo no urbano siempre que se cumplan una serie de criterios (disponer de planeamiento, que no estén expresamente prohibidos, etcétera). Es una forma más ligera de autorizar, por ejemplo, centrales energéticas pero también iniciativas industriales y logísticas que, por su tamaño, no caben en un polígono empresarial normal y corriente.

Cunext necesita para su nueva fábrica unas 30 hectáreas de suelo y lo mejor es que eso se haga lejos de zonas habitadas. La empresa tiene ya el terreno en la carretera de Granada y necesita, además, el procedimiento rápido establecido en la Lista. El texto legal explica que el Ayuntamiento cuenta con un plazo de seis meses para autorizar la fábrica en un procedimiento que incluye tanto la implantación de la fábrica como la licencia de obras.

El proyecto de Cunext para fabricar cobre verde implica desengancharse, al menos parcialmente, del mercado minero-metalúrgico que en estos momentos le provee del cien por cien del material que procesa en sus instalaciones de Córdoba. Las nuevas instalaciones permitirán convertir chatarra en el material del que está realizado el cableado de todos los aparatos que necesitan electricidad para funcionar mediante un sistema de electrolisis. El mercado del alambre de cobre está sufriendo un vertiginoso incremento de ventas como consecuencia del aumento, por ejemplo, de los automóviles eléctricos que precisan de mucho más cableado que el necesita un coche de motor térmico.

El recurso presentado por los partidos de izquierda a la ley autonómica del suelo tenía la pretensión de una anulación general de la norma por problemas de tramitación. Se adoptó, explicaban, el trámite de urgencia. El fallo rechaza esa pretensión porque no se aclara dónde se vulneraron los derechos parlamentarios de una ley que estuvo cocinándose meses con comparecencias e informes especializados.