Los hechos se produjeron sobre las 20.30 horas del pasado 7 de mayo: el Instituto Armado recibió una llamada en la que se informaba de que un camión (que viajaba desde Barcelona con destino Huelva) circulaba dando bandazos por la A-4, sentido Sevilla, ocupando de forma alternativa los dos carriles de la calzada.
Las patrullas movilizadas pudieron confirmar la infracción denunciada y dieron el alto al conductor del camión, al que realizaron las pruebas de alcoholemia y drogas. En la primera arrojó una tasa de 0,78 y 0,79 mg/l, lo que supone quintuplicar la tasa máxima permitida para el conductor de un vehículo pesado, que es de 0,15 mg/l.
Asimismo, en la prueba de detección de drogas en el organismo dio también un resultado positivo en cocaína y anfetaminas, pendientes de confirmación por el laboratorio de referencia.
El infractor, al que se investiga, podría enfrentarse a pena de prisión de tres a seis meses o de multa de seis a doce meses o de trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días, y, en cualquier caso, con la de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.
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